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(Encarni Bernal/ Juan Manuel Serrano) Ya lo anunciaba en Facebook esa misma tarde «Málaga no te escapas ni con peines». 10.000 malagueños se dieron cita la noche del 22 de Septiembre en el palacio de deportes José María Martín Carpena para ver actuar al maestro, Alejandro Sanz.
El espectáculo comenzó con la joven Victoria Ribas, una de las últimas revelaciones del pop español, ofreciendo a los allí presentes tres temas de su primer álbum «Mírame». Sobre las 21:45 ya sí apareció al que todo los «malaguitas» esperaban, como así cariñosamente se dirigió el Alejandro Sanz al público. Con una espectacular puesta en escena, el concierto comenzó con el tema «El silencio de los Cuervos», incluida en su último trabajo, «Sirope». Le siguieron las canciones del mismo álbum «A mí no me importa» y «No madura el coco».
La sorpresa de la noche fue la aparición del joven cantante Abraham Mateo, al que Alejandro presentaba recordando su paso por el programa de Canal Sur «Menuda Noche». Juntos interpretaron el tema »Desde cuándo», del álbum »Paraíso exprés».
Alejandro Sanz recordó también canciones de sus anteriores trabajos, entre ellos, «Quisiera ser el aire», «No me compares», «Camino de rosas», «La música no se toca» (en el que hizo especial mencionó a Paco de Lucía) y el ya mítico «Corazón partío». Pero no podían faltar aquellas canciones de antaño, las que todo el público esperaba con muchas ganas, haciendo un medley con «Amiga mía», «Mi soledad y yo» y «Y, ¿si fuera ella? También recordó aquellas más conocidas de otros trabajos como «Mi marciana» o «Looking for Paradise» y, por supuesto, sus últimos singles «Un zombie a la intemperie» y «A que no me dejas».
Tras más de dos horas de música en directo, para poner el broche final interpretó un clásico, el tema ¿Lo ves?, él mismo a solas con el piano, y se despidió de Málaga interpretando junto con el público una animada versión del single que lo lanzó al estrellato: «Pisando Fuerte». Una noche que los entusiastas del cantante madrileño tardarán en olvidar.
