Oña: “Estos 100 días de la Junta nos dejan un escenario de estancamiento y retroceso

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foto Oña y Garrido 1octubre

• La parlamentaria andaluza acusa al gobierno de Susana Díaz de acrecentar las deficiencias que sufren en Málaga los servicios públicos que dependen del Ejecutivo andaluz
• Esperanza Oña lamenta que el balance no es «en nada positivo» en un escenario de «no hay nada que cambiar porque al PSOE le va bien y sigue gobernando sin cambiar nada»

(Prensa PP Málaga) La parlamentaria andaluza Esperanza Oña ha criticado hoy que los primeros 100 días del gobierno de la Junta de Andalucía «nos sitúan en un escenario que no es de progreso, sino un escenario de estancamiento y retroceso», en referencia a los problemas que siguen afectando a los servicios públicos que dependen del Ejecutivo andaluz.

Oña, que ha hecho balance de este inicio de legislatura autonómica junto con el también parlamentario Antonio Garrido, ha lamentado que «sin querer ser pesimista ni alarmista, desde el realismo más absoluto, podríamos decir no sólo que nada ha cambiado, sino que precisamente porque nada cambia y se siguen acumulando los problemas sin resolverse las situaciones empeoran».

En este sentido, la parlamentaria malagueña ha destacado que Andalucía es la comunidad autónoma en la que más impuestos se pagan junto con Cataluña, por lo que Andalucía se ha convertido en un «infierno fiscal», según Oña, «en el que las promesas de bajar el tramo autonómico del IRPF no se han cumplido, ni hay visos de que se cumplan».

Además, ha incidido en que la Junta mantiene el cobro del canon del agua, por el que ya ha recaudado 320 millones de euros que, sin embargo, no se han destinado a inversión alguna. «Tenemos un impuesto del agua que se crea para ejecutar las infraestructuras de depuración, pero ni se hacen esas infraestructuras ni se deja de cobrar ese impuesto», ha afirmado.

La peor política social

A eso se suma, según Esperanza Oña, que «la peor política social la estamos pasando en los últimos meses, cuando hemos podido ver cómo el recorte a los colectivos más necesitados, a personas con discapacidad, mayores o centros de atención a personas con dependencia ha sido brutal, de un 91% en la ejecución del presupuesto».

Pero además el gobierno andaluz «se ha olvidado de todos los niños que necesitan atención temprana; tal es así, que toda la oposición nos tuvimos que unir para llevar una PNL conjunta al Parlamento para que los niños que necesiten una atención temprana la puedan tener, firmada por todos los grupos menos por el PSOE».

Igualmente, Oña ha recordado que «ahora mismo en dependencia tenemos 18.186 andaluces que están en lista de espera, precisamente esperando a que se les aporte el recurso que puedan necesitar; y de esos, 1.600 son dependientes malagueños».

Inicio del curso escolar

En cuanto a las carencias en materia educativa, la parlamentaria andaluza ha lamentado que 8.000 niños en toda Andalucía hayan comenzado el curso estudiando en aulas prefabricadas.

«Parece que las aulas prefabricadas no preocupan, y por supuesto no avergüenzan al gobierno andaluz; por el contrario, parece que a veces incluso sacan pecho y presumen de que son muy cómodas», ha afirmado, «pues en Málaga tenemos 1.500 niños en aula prefabricadas, con el insólito caso del colegio Indira Gandhi de Mijas, hecho enterito de estas aulas sin ningún tipo de pudor y en el aparcamiento de otro colegio, y esto no le parece mal a la Junta».

A eso, Oña ha añadido que «el 80% de los colegios no son bilingües después de 33 años de PSOE», que «el 75% de los centros no tienen aula matinal ni actividades extraescolares» o que «40.000 alumnos andaluces se han quedado este curso sin poder acceder a la Formación Profesional».

Recortes en Sanidad

«La Sanidad es verdaderamente más deficiente que el año anterior», según Esperanza Oña, quien ha lamentado que todos los agentes coinciden en que se han producido unos recortes en materia sanitaria que rondan los 2.000 millones de euros.

«Se cierran el 22% de las camas en verano, y en consecuencia han aumentado las listas de espera quirúrgicas». Además, la parlamentaria popular ha lamentado que «con la señora Díaz siguen los contratos basura en el SAS, siguen los despidos de profesionales y los recortes de salarios a estos profesionales».

Unos profesionales que son, según Oña, los que «están demandando ya la construcción de un nuevo hospital, porque es urgente la necesidad que tenemos en Málaga de un nuevo centro hospitalario». «Para igualarnos a la media nacional necesitamos 800 camas, Málaga es la provincia peor parada en inversiones sanitarias», ha criticado, «porque en Málaga la Junta tiene grandes deudas pendientes».

En este sentido, Esperanza Oña ha citado la ausencia de noticias del tercer hospital de Málaga capital, «del que nunca hubo la intención de construirlo», el retraso en la apertura del CHARE del Guadalhorce o los incumplimientos con los anunciados en Estepona y en Fuengirola y Mijas. Pero además, ha recordado que las obras de ampliación del hospital Costa del Sol siguen paralizadas «cinco años después».

Según Esperanza Oña, «este es un balance que no tiene trampa ni cartón, porque lo hacemos con datos absolutamente reales y cifras sacadas de las propias respuestas parlamentarias» y en consecuencia el balance no es «en nada positivo». Oña ha denunciado que estos datos nos sitúan en un escenario de «no hay nada que cambiar porque al PSOE le va bien y sigue gobernando sin cambiar nada».

El Gobierno de las palabras

Ante este balance, Antonio Garrido ha acusado al Partido Socialista de «utilizar como un mantra» el mensaje de que «la culpa de todo la tiene el PP». En ese sentido, Garrido ha hecho un ejercicio de autocrítica admitiendo que desde el Partido Popular no se consigue explicar todo lo que hace bien, porque «cuando uno está más en la gestión, no está en la propaganda; y el gobierno de Susana Díaz sigue siendo un gobierno de palabras y de propaganda», ha afirmado.

Según Garrido, «es importante que los malagueños y los andaluces entiendan bien el mensaje del PSOE», porque en Andalucía, lamentablemente, «hay que seguir utilizando la palabra ‘régimen’, porque – a su juicio – lo sigue siendo».