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(Nota Prensa IU Alh Torre) Toca el turno de debatir sobre los debates. Unos debates en los que, sistemáticamente (de «sistema» y por «el sistema») están dejando fuera a Izquierda Unida – Unidad Popular, la única fuerza política nítidamente de izquierdas, para dar paso al bi-bipartidismo representado por el PP y el PSOE y sus marcas blancas.
Izquierda Unida – Unidad Popular presentó el pasado 26 de noviembre un recurso ante la JEC, porque vulneran la igualdad y la neutralidad informativa que exige la Ley Electoral. Pero mientras denunciamos el incumplimiento alevoso de la norma, esta fuerza está volcada en los debates en las calles, en donde, por cierto, se incrementa de manera exponencial el interés por nuestro discurso y nuestras alternativas.
No es nuevo, por cierto, que se nos excluya de los debates. El pluralismo es un concepto escasamente respetado, máxime cuando se trata de una fuerza política que plantea una ruptura con este sistema para abrir un nuevo proceso constituyente. O sea, la fuerza que dice alto y claro que democratizar las instituciones incluye a los partidos, al parlamento … y a la Jefatura del Estado. Es decir, abrir las puertas y las ventanas al verdadero cambio de modelo que es lo que están tratando de impedir con la exclusión de la tercera fuerza parlamentaria faltando al respeto a los dos millones de votos que obtuvo en 2011 la Izquierda Plural.
Y si se quisiera ser objetivo de verdad, atendiendo al pluralismo político, a la norma electoral o a la excusa de las encuestas, nuestro candidato a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, es el mejor valorado en una de las más fiables. No hay motivos ni reales ni aparentes: #SinGarzónNoHayDebate
Como dice nuestro coordinador andaluz Antonio Maíllo, es una vergüenza que las televisiones u otros medios privados se dediquen a excluir a IU-UP condicionando el voto de la gente, y reprocha el silencio cómplice de Teresa Rodríguez (Podemos) y Juan Marín (C’s) por los que IU dio la cara en las autonómicas para que pudieran estar en aquellos debates. Hoy, vergonzosamente, guardan silencio.