La Diputación trabaja en políticas transversal para detectar y corregir desequilibrios salariales entre su personal

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Con motivo del Día por la Igualdad Salarial entre Mujeres y Hombres, la vicepresidenta Ana Mata recuerda que el Plan de Igualdad de la institución busca implantar la perspectiva de género en otras las delegaciones

(Prensa Diputación de Málaga)La Diputación de Málaga está trabajando en políticas transversales internas con el fin de detectar y corregir los posibles desequilibrios que puedan existir entre el personal de la propia institución. Así lo ha anunciado la vicepresidenta y diputada de Igualdad e Innovación Social, Ana Mata, tras la mesa de igualdad celebrada con representantes de las distintas formaciones políticas de la Diputación.

Con motivo del Día por la Igualdad Salarial entre mujeres y hombres, Mata ha recordado que uno de los principales ejes de trabajo de la delegación es implantar la igualdad en cada una de las competencias del ente supramunicipal a través de la estrategia de Igualdad hasta el 2019 (Igual=Mente).

La diputada ha explicado que el Informe de Impacto de Género que acompaña a los Presupuestos de la Diputación Provincial de Málaga de 2017 y que elaboran conjuntamente las Delegaciones de Recursos Humanos e Igualdad, muestra cómo en los últimos años se ha producido un aumento del número de mujeres que acceden a puestos directivos. Sin embargo, la brecha de género se ha cerrado sólo con un 0,6% entre 1995 y 2015, lo que demuestra, según la ONU, «que podría llevarnos más de 70 años para alcanzar la igualdad igualdad salarial entre hombres y mujeres», ha incidido Mata.

La diputada, que recientemente se ha reunido con la Secretaria General de la CEM, Natalia Sánchez, para tratar sobre estos asuntos, ha añadido que «todavía queda mucho por hacer, fuera y dentro de nuestra institución, pero estamos trabajando firmemente en alcanzar la efectiva aplicación del principio de igualdad de retribución que recoge nuestro ordenamiento jurídico, porque no solo se trata de justicia social». «La igualdad salarial beneficia a la sociedad, a las propias trabajadoras, y por supuesto, beneficia a las instituciones y a las empresas al poner en valor el trabajo que realiza la mitad de la población», ha concluido.