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Ya sea al realizar compras de cualquier tipo, o crearte un perfil en una red social, debes tener cuidado con los datos que facilitas.
La compra mediante internet se ha convertido en una de las prácticas más recurrentes por los internautas, aunque es un medio bastante peligroso y del cual aún muchos no se fían, la gran cantidad de opciones y los precios tan bajos que podrás encontrar en el mismo, lo hacen un mercado muy atractivo y casi irresistible.
Acceder a todo tipo de elementos (destacando aquellos de origen tecnológico) como por ejemplo grabadoras de voz, componentes para el ordenador, televisores y otra gran cantidad de periféricos, gadgets, etc. Es posible gracias a la gran cantidad de posibilidades que ofrece precisamente la red a través de las tiendas online, ya sea a nivel de portal web (páginas web comunes y corrientes) o a través de terceros, como prestashop y otras tantas plataformas que sirven como intermediarios para poder crear tu propia tienda virtual.
Uno de los últimos en sumarse a esta propuesta cada vez más popular es la propia red social de Facebook, la cual permite a distintas marcas, empresas y distribuidoras crear una tienda oficial a través de la propia plataforma, mediante las páginas o «fanpage» de Facebook pudiendo llegar a vender los productos o servicios pertinentes a través de la misma. Sin embargo, deberás de tener cuidado con el tipo de productos que ofreces, ya que este es un medio regulado por terceros, el cual tiene sus propias normas, y todo aquel contenido catalogado como «inadecuado» por los motivos que sean, podrían causar en eliminar cuenta de facebook que administre dicha tienda online a través de la página. El contenido adulto, u extremadamente ofensivo para el público general de la red social, o algún colectivo en concreto, son aquellos que corren un mayor riesgo de ser penalizados por los administradores. Debes tener cuidado, por tanto, con el tipo de información que compartes ya que todo tiene sus consecuencias: puede ser que este medio de comunicación ofrezca gran cantidad de facilidades, pero éstas también incluyen un gran número de responsabilidades.
Responsabilidades derivadas del uso de redes sociales, cuentas y perfiles en internet.
Algunas de estas tienen que ver con la seguridad de tus datos personales, así como de la información que compartes a través de la misma. Que existen algunos internautas con intenciones maliciosas que infectan los ordenadores y móviles en busca de poder obtener algún tipo de beneficio a través de los propios virus o malwares no es ninguna novedad, y está en nuestras propias manos el poder evitar este tipo de situaciones, que se presentan como la principal problemática a la hora de comprar por internet, algo de lo que ningún internauta está cien por ciento a salvo, por lo que hay que ser muy precavido cuando se realice cualquier gestión o compra vía internet. Casos muy sonados, como la filtración de fotos personales e íntimas de famosas robadas directamente de sus teléfonos móviles tras hackear gmail y otros medios son las pruebas más evidentes de la gran magnitud de este problema, algo que podría ocurrirnos también a nosotros. Y no es algo que sólamente ocurra con respecto a las imágenes o videos comprometidos: elementos que van desde una gran relevancia como por ejemplo los datos de una cuenta bancaria, e inclusive el robo de contraseñas algo menos trascendentales como es el caso de cuentas pertenecientes a juegos android u otras plataformas pueden verse afectadas por este tipo de intrusiones, y pese a que la importancia de unas y otras no sea algo equiparable, la idea es concienciar a todos los usuarios de que cualquier medida de seguridad extra que puedas añadir por tus propios medios a la creación de tus perfiles y cuentas en cualesquiera sean las plataformas online donde te registres, reducirán este riesgo tan presente y real.
Esto, evidentemente, afecta también de forma directa a las compras por internet anteriormente mencionadas, ya que precisamente si se realiza un hackeo masivo con respecto a una web online famosa donde tengas añadido tus datos bancarios como método de pago recurrente, podrías acabar sufriendo desde el robo de todos tus activos, hasta una suplantación de identidad, e inclusive ambas a la vez.
