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La alcaldesa, Ana Mula, ha sido la encargada de inaugurar la nueva imagen de este vial, uno de los principales accesos a la ciudad
Ya se está trabajando en el proyecto de la segunda fase de la avenida, en el cual se apuesta por conservar los dos carriles por sentido
Un sueño hecho realidad. Así ha definido hoy la alcaldesa, Ana Mula, la reforma de la primera fase del Bulevar Alcalde Clemente Díaz Ruiz que ha sido inaugurada con una gran fiesta en la que han participado más de tres mil de personas. Y es que tras meses de duro trabajo y esfuerzo por fin esta avenida ha estrenado una nueva imagen, en la que se ha apostado por compaginar las zonas para los peatones, con los vehículos y los aparcamientos, todo ello en una de las vías que es considerada uno de los principales accesos a la ciudad, pues enlaza la autovía con el centro de la ciudad.
(Prensa Ayuntamiento Fuengirola) La alcaldesa ha sido la encargada de descubrir el monolito que a partir de ahora estará colocado en la entrada del bulevar. Allí ha explicado que era más que necesaria realizar una remodelación completa de este vial, pues su diseño había quedado obsoleto puesto que su última «mejora» fue en abril 1996, es decir, hace ya 20 años No obstante, debido a su envergadura se ha optado por hacerla por fases. Lo que hoy se ha inaugurado y abierto al tráfico es la primera etapa, que ha abarcado la reforma completa de las infraestructuras soterradas y en superficie comprendidas entre la calle Blanca Paloma y la avenida Jesús Santos Rein, lo que supone 485 metros lineales y 15.500 metros cuadrados de superficie, tal y como ha detallado Mula.
«Estamos viendo que este entorno se convierte en algo más que un paseo; es un sitio para estar, para compartir, para crear y una apuesta decidida por el cuidado de nuestro mundo. Este proyecto es el claro ejemplo de un espacio de convivencia», ha indicado la alcaldesa durante su discurso.
La obra
Cabe recordar que el pasado nueve de enero dieron comienzo estas obras de remodelación integral en su primera fase, en concreto en el tramo comprendido entre el paseo Jesús Santos Rein y las calles Blanca Paloma y Miguel Bueno. La actuación ha contado con un plazo de ejecución de dos meses y medio y un presupuesto de 2.016.570 euros, una cantidad a la que hay que sumar los más de 600.000 euros en mejoras realizadas, tal y como ha indicado Mula. Gracias a la puesta en marcha de estos trabajos se han renovado todas las redes de suministros, incluyendo nuevas canalizaciones de pluviales y fecales, que se han cuadriplicado, de abastecimiento de agua, electricidad, telefonía…
Asimismo, se han reordenado las zonas aparcamientos, manteniendo el mismo número, y se han colocado nuevas luminarias con iluminación de bajo consumo, mejorando enormemente la visibilidad en la zona y apostando por el cuidado del medio ambiente al reducir la emisión de gases. Pero lo que es más importante, lo que hasta el momento era un lugar de paso ha pasado a ser un espacio que invita a pasear, aunque sin perder su condición de arteria de tráfico, ya que como se ha señalado anteriormente, es uno de los accesos más usados del término municipal.
«Nunca es fácil impulsar la creación o la remodelación integral de una calle. Detrás de cada iniciativa que planteamos hay muchos meses de trabajo de los técnicos municipales, muchas horas de esfuerzo de los operarios y, por qué no decirlo, también la labor incansable de nosotros, los concejales del equipo de gobierno. Esta obra sólo puedo calificarla como un proyecto muy complejo, porque tan importante es lo que se ve, como lo que va por debajo», ha detallado Mula.
Uno de los aspectos más destacables del proyecto ha sido la creación de un bulevar central, en el que la vegetación tiene un papel protagonista con la colocación de más de 130 palmeras y jardineras. Con esta instalación se ha sustituido a la mediana que había hasta el momento, la cual restaba visibilidad al espacio, para dar al peatón el papel que se merece, todo ello sin perjudicar el tránsito de vehículos. Además, y por primera vez en el municipio, los pasos de peatones cuentan con LED que permite, a través de un sensor, que cada vez que una persona pase se iluminen, por lo que la zona ha ganado aún más en seguridad. La innovación de nuevo se convierte en el sello de identidad de un proyecto en Fuengirola.
«Entre los detalles de este sitio que día a día se va a hacer más familiar para nosotros, os invito a que os fijéis en cada diseño, que ha sido elegido con esmero: en los bancos con líneas fluidas, en las papeleras modernas, en los maceteros que han sido adornados para aportar más verde y, por supuesto, en las palmeras que hemos plantado y que se han convertido en la gran seña de identidad de este nuevo bulevar. Y además, todo ello ha sido posible manteniendo las plazas de aparcamiento, por las que tantas veces me habéis preguntado. Aquí, como hasta ahora, se podrá aparcar», ha afirmado Ana Mula.
Pero el ritmo de trabajo no para, y como ha indicado la alcaldesa, ya se tiene la mirada puesta en la segunda fase del bulevar, la que va desde la calle Blanca Paloma en dirección a la autovía. El diseño será homogéneo y se conservarán los dos carriles por sentido.
«Sé que quedan algunos meses para que podamos continuar, ya estamos trabajando en esta etapa posterior. Espero, de verdad, contar con vuestro apoyo, como hasta ahora, y que dentro de algún tiempo vengamos a este bulevar, pero para inaugurar un nuevo tramo. Mi sueño, es que Fuengirola sea la ciudad ejemplo del futuro: amable, social, innovadora y de oportunidades. Con el paso que hoy damos demostramos que vamos por buen camino», ha concluido la alcaldesa, no sin antes invitar a todos los asistentes, y en especial a los niños, a que disfrutaran de la jornada festiva, ya que por toda la calle se han distribuido talleres, juegos, hinchables, segways y puestos donde se han repartido algodones de azúcar, buñuelos y helados. Un día de fiesta que quedará marcado en la historia de la ciudad.
