Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 39 segundos
0. Un aforismo es quizás un silencio con palabras, ahora con imágenes se llama poesía visual. Un aforismo es en una docena o veintena de palabras, intentar meter un estado del mundo, un estado mental, un futuro en unas palabras. Un aforismo o máxima o apotegma, o todas las variedades existentes desde la antigüedad, es una especie de fórmula o definición con palabras, para intentar conocer o transformar el mundo. Al final, si nos fijamos bien, los «credos y dogmas de todas las ideologías, seculares o religiosas, son aforismos-frases cortas concatenadas una detrás de otras». Que son los discursos políticos sino aforismos combinados.
1. Georg Christoph Lichtenberg (Ober-Ramstadt, 1742, + Gotinga, 1799), se dedicó a la investigación científica y a la enseñanza universitaria, y en sus ratos libres, diríamos que escribía de temas, que con todo respeto, se podrían indicar que eran literarios. En definitiva narrar los estados de su espíritu, como él diría.
Cosa de la fortuna o del azar, como científico, su nombre ha sido casi olvidada, aunque descubrió algunas pequeñas cosas como las llamadas figuras de Lichtenberg, aunque levantemos una bandera-lanza por él, los pequeños descubrimientos, son los que hacen posible, los grandes descubrimientos e invenciones y teorías a lo largo de la acumulación cultural. Pero dejó una serie de escritos, fragmentos cortos, frases, que han pasado al acervo de la cultura mundial, los famosos aforismos de Lichtenberg. Por consecuencia introduzcámonos mínimamente en algo de la biografía y de los escritos literarios de nuestro autor, como siempre en forma de homenaje y con sumo respeto:
– Es curioso que su padre, pastor protestante tuvo diecisiete hijos, por tanto él era uno de ellos. Desconozco si todos sobrevivieron, creo que agradecerá usted lector mi sinceridad, cosa que parece imposible, por el número y la época. Pero creo que es un detalle a tener en cuenta, quizás, su acendrado escepticismo, incluso antirreligioso o anticlerical, quizás provenga de este origen, o conceptos que hemos indicado en este párrafo.
Tenía una discapacidad física, que pudo influir en su interés científico, en su deseo de saber de muchos temas, en su espíritu inquisitivo y de probar posibilidades e hipótesis, al menos lingüísticamente. Hoy, denominaríamos diletantes, pero en sus viajes a Inglaterra, fue recibido varias veces por la casa real. Lo cual, hoy, teniendo en cuenta que fue catedrático universitario y recibió otros honores, hoy diríamos que fue una persona de éxito y con éxito en la vida, o al menos, diríamos suficiente a nivel profesional, conociendo grandes figuras de su tiempo. Ciertamente, ni él pensó que sus escritos, denominémoslos literarios, tendrían importancia, y es por lo que ha pasado a la historia del pensamiento-literatura, y es por lo que hoy, lo recordamos en este modesto artículo.
– En general el aforismo o el fragmento corto, está despreciado en gran parte de la actividad literaria y filosófica, se considera como un género menor dentro del género del ensayo, pero olvidamos que a lo largo de la historia ha tenido grandes autores (Marco Aurelio, Epicteto, Pascal, Lichtenberg, Nietzsche, Schopenhauer, Cioran, Gracián, Benjamin, etc.).
Por lo cual, deberíamos reflexionar, más y mejor sobre este género, por lo cual deberíamos reflexionar mínimamente, porque un conjunto de fragmentos cortos, en un libro de cincuenta o cien páginas, forman y conforman una unidad estimable, o dicho de otro modo forma una estructuración, o si se quiere, multitud de perspectivas-ópticas-dimensiones-variantes sobre una serie de temas, por lo cual, no es tan desestructurado como parece.
Por otro lado, vivimos en un tiempo en el que las nuevas tecnologías, el poco tiempo de las personas, este subgénero puede servir y ayudar e incentivar para reflexionar-pensar-meditar en cualquier situación-circunstancia. Tener un poco de tiempo y espacio para reflexionar, o para dejar que la mente haga lo que tiene que realizar que es percibir-pensar-reflexionar, y no siempre estar consumiendo productos culturales, no siempre estar atado al móvil-tableta-ordenador-etc. En definitiva dejar al cerebro-psique-mente-alma nos hable a nosotros mismos, escuchar y escucharnos, modestamente, prudentemente, a nosotros mismos.
– Sus aforismos, son una combinación de aforismos morales y sobre multitud de otros temas y perspectivas, llenos, a veces, de conocimiento y sabiduría, otras veces, de ironía, no nos atrevemos a indicar de sarcasmo, pero desde luego casi siempre, nos reflejan, aspectos muy profundos del ser humano, de algún aspecto de la humanidad, de un fragmento de la cultura, por ejemplo, y que sirva de demostración el siguiente: «los santos esculpidos han ejercido en el mundo mucha mayor influencia que los vivos».
No olvidemos que era un hijo de un pastor protestante, de cierta importancia en su jerarquía de su congregación.
Pero si reflexionamos sobre esta simple frase, nos está, entre otros motivos, poniendo frente a la historia de las religiones, conformada-formada por imágenes, por arte plástico, sea escultura, sean pinturas, sonidos musicales, palabras con imágenes, etc. Al fin, de cuentas, hasta hace poco, en el imaginario colectivo, el pueblo sabía y conocía multitud de detalles de los santos de su tradición geográfica, más que sobre el rey que reinó hace cien años.
2. Para terminar quisiese recordar una de sus frases o fragmento de frase: «Entre los mayores descubrimientos que ha hecho la inteligencia humana […], está el arte de juzgar libros sin haberlos leído».
¡Qué más le podemos pedir a un autor, que está esperando que usted se acerque con sus ojos-mente-cuerpo, y empiece a comprender los dilemas-trilemas que plantea, pero también las contrariedades-contradicciones que están en su escritura. Quizás, al no volver a reexaminar y reevaluar sus propios escritos, le sucede como a todo ser humano, vivimos, creemos vivir en una identidad ideológica cultural, pero en el fondo vivimos-existimos en una contrariedad-contradicción-dilemas-tetralemas, entre vida y pensamiento y actos, según el día, según el año. Pero evidentemente a eso, a eso lo denominamos evolución y progreso…
Lichtenberg y otros aforistas le esperan a usted, desde hace décadas a que vuelva sus ojos ante sus palabras-imágenes. Siempre interpretándolos con racionalidad-prudencia-sentido común y saber ortodoxo y saboreándolo despacio… A veces, me pregunto y pienso, si Montaigne se reiría de Lichtenberg y Lichtenberg de Montaigne, pero ambos se entenderían-comprenderían en los entresijos más profundos del ser-estar de la vida-existencia.
Y como diría Lichtenberg: «cada cual es un genio, al menos una vez al año […]». Por lo cual, su genialidad, la genialidad que usted tiene que descubrir este año le está esperando detrás de la puerta de su conciencia-consciencia. Paz y pan y bien.
http://soliloquios.blogia.com © jmm caminero (17 mayo-30 junio 2017 cr).
Fin artículo 869º: «Solitarios: Lichtenberg».