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Los créditos rápidos se han convertido en una de las alternativas más populares entre las personas que están buscando ayuda financiera, ya que ofrecen una gran cantidad de facilidades con respecto a los préstamos personales ofrecidos por las instituciones bancarias tradicionales.
Hasta hace algunos años las alternativas a los préstamos personales que ofrecen los bancos tradicionales eran muy reducidas e incluso daban poca confianza. Pero en los últimos años han aparecido varias empresas que ofrecen créditos en los que la persona no necesita cumplir con requisitos tan estrictos, dando lugar a los Créditos rápidos que se han vuelto una opción muy popular.
Pero ¿cuáles son las ventajas que han convertido a este tipo de créditos? ¿por qué se han convertido en una opción muy popular entre las personas que necesitan ayuda financiera?
La principal desventaja de este tipo de créditos es que suelen tener intereses más elevados que los créditos convencionales, aunque al ofrecer cantidades de dinero más reducidas y en menos tiempo (horas o días), la gente los puede pagar en pocos días y salir de problema financiero que se tenía que pagar urgentemente.
Cuáles son las principales ventajas de los créditos rápidos
Lo cierto es que, a pesar de tener intereses más altos en la mayoría de los casos, las ventajas que ofrecen este tipo de créditos son tan llamativas que valen la pena tenerlas en consideración.
Para empezar, es posible obtener prestamos sin papeles, facilitando el proceso notablemente en comparación con los tardados procesos de aprobación de los bancos tradicionales que solicitan una gran variedad de papeles y comprobantes. En el caso de los préstamos personales convencionales, el banco solicita documentación como comprobantes de domicilio, identidad, la última copia de la nómina, etc., una gran cantidad de papeles que hacen que la tramitación del préstamo sea más tardada.
Las entidades que ofrecen préstamos rápidos suelen ser mucho más flexibles en este aspecto. Por lo general lo único que necesitan es una foto de la identificación por ambos lados, una foto de la persona junto con la identificación y una cuenta bancaria a la que depositarán el dinero una vez se haya aprobado el préstamo. La documentación necesaria puede variar de entidad a otra, pero la gran mayoría son bastantes flexibles.
Otra ventaja que no podemos olvidar es la vía de solicitud. A nadie le gusta ir al banco, hacer fila durante varios minutos en lo que el ejecutivo se desocupa y formar parte de una entrevista que puede durar varios minutos para que al final la persona tenga que esperar varios días en lo que el banco decide si la persona califica para el crédito o no.
Estos préstamos rápidos se pueden solicitar desde la comodidad del hogar y es posible que sea aprobado y depositado ese mismo día. Gracias a que muchas de estas entidades funcionan como una plataforma online, no es necesario salir de la casa y hacer fila para solicitar el préstamo, algo que facilita bastante todo el proceso.
Gracias a que hay múltiples entidades que ofrecen estos préstamos es posible comprar y elegir la opción que mejor se ajuste a las necesidades del cliente. Internet está lleno de información y reseñas de personas que han usado estas plataformas, pero si se quiere ahorrar tiempo es posible usar páginas como https://www.topcreditos.es/ en las que se pueden comprar las distintas entidades en cuestión de minutos y determinar cuál es la mejor opción disponible.
Lo cierto es que este tipo de préstamos suelen ser la única opción viable para personas que bajos recursos o que tengan problemas financieros. Mientras que los bancos tradicionales piden de requisito tener un salario mínimo que puede ser bastante elevado para algunas familias, las entidades que ofrecen préstamos rápidos no le dan tanta importancia a la solvencia de la familia, aunque pueden limitar el monto del crédito, aceptando una cantidad menor a la solicitada.
De cualquier forma, es un hecho que estos préstamos cuentan con varias ventajas y que son la mejor opción para que muchas personas puedan salir de una urgencia económica como pagar la colegiatura, arreglar el auto, etc…
