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El Gobierno del Cantón suizo de Schwyz aportará el importe restante.
Hace justamente tres años que la Asociación Histórico – Cultural “Teodoro Reding” elegía en Asamblea General a Juan Vega como escultor de su proyecto de monumento a Reding en Málaga. Con ello, y la presentación oficial en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento en abril de 2015, este colectivo formado por voluntarios de todas las edades se comprometía, con la ciudad y con el propio artista, a trabajar sin descanso para conseguir los fondos necesarios para la estatua de este gobernador que se preocupó ejemplarmente del bienestar de los malagueños de primeros del siglo XIX.
Tras dos años de numerosas actividades (actos divulgativos, rutas culturales, representaciones históricas, charlas y conferencias, participación en exposiciones, campaña de recogida de céntimos, conciertos…), la asociación, presidida por el malagueño Jon Valera, ha conseguido recaudar más de 13.000€ que confirman, céntimo a céntimo, que cientos y cientos de ciudadanos quieren el monumento. Camino que ha sido aún más difícil por voluntad propia, porque estos voluntarios siempre han sido conscientes de la realidad social, destinando parte de esas recaudaciones a fines sociales, muy en consonancia con el espíritu de Reding. A ello se sumó la colaboración de la Embajada de Suiza en España, que decidió apoyar la iniciativa con una ayuda de 5.000€. Y, como el colectivo anunció más recientemente, la de la familia Reding de Schwyz -la localidad natal de Reding-, la más directa, que ha aportado otros 10.000€.
Habiendo quedaba estipulado en un contrato que la ayuda de la Embajada habría de ser devuelta si no se conseguía la totalidad de los fondos en noviembre del presente año, la asociación, a través del profesor Ital von Reding de Zúrich, ha presentado el proyecto ante el Gobierno del Cantón del Schwyz, que, considerando la importancia de rescatar un importante vínculo histórico con España y a la vista de las últimas aportaciones particulares, ha confirmado que aportará el importe restante correspondiente a la escultura.
Aunque otra condición era que quedara inaugurada en 2017, consciente del trabajo continuo de la asociación, la Embajada se ha visto satisfecha con el fin de la recaudación y el hecho de que el artista, comprometido y deseoso de sacar el proyecto adelante, empezara a trabajar en la obra tras haberse conseguido solamente el importe de la fundición en bronce, antes de esta feliz noticia. No será en 2017, pero sí quedará terminada a tiempo del recuerdo, en su 210º Aniversario, de la batalla de Bailén (1808), en la que Reding dirigió como general a las divisiones españolas -y entre ellas numerosos malagueños- que vencieron por primera vez en la Historia a un Cuerpo de Ejército napoleónico en campo abierto en el marco de la Guerra de la Independencia española.
El siguiente paso es la ubicación final del monumento, para lo que la asociación ha solicitado al gobierno municipal una reunión. Las localizaciones preferidas son el inicio de la Alameda, que Reding reformó impulsándola como paseo principal de la ciudad; la Plaza de la Aduana; o Calle Molina Lario, en el nuevo entorno peatonal de la Catedral -mirando hacia la Plaza de la Marina y el Puerto-, tan ligado a sus acciones durante su estancia en nuestra ciudad.
Con motivo de lo que será un importante acontecimiento, el colectivo de Valera, con doce años de trayectoria, también desea retomar algunos deseos esbozados durante este tiempo, como el nombramiento de Reding como Hijo Adoptivo de Málaga; el posible hermanamiento de Málaga con la localidad de Schwyz, en atención no sólo a la figura del homenajeado sino a la de los casi 200 suizos de su regimiento que perecieron infectados durante las epidemias de fiebre amarilla que padeció la ciudad en 1803 y 1804 intentando contener la enfermedad; o la organización de una exposición que reúna los objetos que relacionan a Reding con Málaga y España, como el bastón y el sable con los que los malagueños le obsequiaron tras la victoria en Bailén.
