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El monumento que da nombre al municipio, declarado como BIC, se suma al proceso de transformación del centro urbano que comenzó este enero
(Prensa Ayto Torremolinos) El Ayuntamiento de Torremolinos ha recibido del Ministerio de Fomento una subvención de 158.647 euros para acometer la rehabilitación de la Torre Pimentel. La ayuda, que supone el 70% total de la actuación y se enmarca dentro del Programa ‘1,5% Cultural’, ha sido concedido tras la mejora de la solicitud presentada por el área municipal de Urbanismo el pasado mes de agosto. De esta forma, el monumento se suma al proceso de transformación del centro urbano y el entorno de la Cuesta del Tajo, donde se encuentra ubicado, y cuyas obras comenzaron el pasado 8 de enero.
El objeto de esta ayuda estatal es intervenir, mediante cofinanciación con su titular –en este caso el Ayuntamiento-, en la recuperación o enriquecimiento de inmuebles declarados Bien de Interés Cultural, de titularidad y uso públicos, o privada sin ánimo de lucro, pero cedidos al uso público. “De nuevo podemos dar buenas para noticias este 2018, que como estamos viendo será el año de la transformación de nuestro centro urbano, a la que ahora se une la puesta en valor de un momento tan representativo de Torremolinos como la torre Pimentel o torre de los Molinos”, ha asegurado Maribel Tocón, concejala de Urbanismo.
Las actuaciones propuestas, que superan los 226.000 euros de inversión, están enfocadas a detener el proceso de deterioro del monumento, su restauración y su puesta en valor como elemento esencial para la comprensión por parte de la población -mediante actuaciones de formación, difusión y sensibilización ciudadana- del papel determinante jugado por la torre vigía en la historia de la localidad.
En este sentido, el proyecto incluye conceder a la torre y los espacios adyacentes un nuevo protagonismo cultural como escenario para la teatralización y la realización de recreaciones históricas contextualizadas en la época de su construcción, otras expresiones artísticas y la rehabilitación de los paramentos laterales de la torre para proyección de imágenes. El edificio goza de protección arqueológica desde 1949 y fue declarado como Bien de Interés Cultural con categoría de monumento, por lo que el Ayuntamiento de Torremolinos pretende ponerlo en valor y recuperarlo para el uso ciudadano como nexo de unión con su historia.
En 2014, el Partido Popular formuló su candidatura a esta subvención que fue denegada al no obtener la puntuación suficiente para recibir la ayuda de este programa de conservación. Por este motivo, desde el área municipal de Urbanismo, que dirige la concejala Maribel Tocón, se presentó un proyecto mejorado en el que se redefinieron aspectos de la memoria técnica del plan anterior que estaban valorados con cero o dos puntos sobre 15.
Reducir barreras visuales
El objetivo de este proyecto es armonizar paisajísticamente el entorno inmediato de la Torre Pimentel, actuación que precisa de la colaboración necesaria del vecindario y locales comerciales que habrán de homogeneizar la cartelería de los establecimientos y embellecer el entorno de la torre, uno de los lugares más transitados de la ciudad.
La torre tiene 18 metros de altura, con una base totalmente maciza. Está dividida en tres partes, con dos estancias que ocupaban los torreros que se encargaban de la vigilancia de la costa desde la Edad Media. Formaba parte del sistema defensivo del Reino Nazarí de Granada y es una de las cinco torres datadas en la época medieval, de las 21 que se conservan en total en la provincia de Málaga.
Proyecto global
En su plan de actuaciones, el Ayuntamiento tiene especial interés en conservar los restos del travertino que forman los tajillos o acantilados que quedan sin ocultar por las edificaciones, por recuperar el Molino de la Bóveda y lograr un entorno que enriquezca la visión de la torre nazarí y del paisaje desde esta atalaya.
El área municipal de Urbanismo ha iniciado diversos procedimientos administrativos para eliminar elementos que perjudican la visión de la Torre de los Molinos, de propiedad municipal, declarada BIC por la Junta de Andalucía, tales como toldos, carteles, rótulos y señales, entre otros. En las actuaciones previstas se contempla la supresión de una serie de elementos que obstaculizan el libre acceso al mirador conocido como Las Cañoneras.
