El diputado Juan Antonio Gil reclama más personal y más inversiones en infraestructuras sanitarias para Torremolinos

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(Comunicado Costa del Sol Sí Puede) Torremolinos arrastra problemas en materia de infraestructura sanitaria y de personal que han vuelto a quedar en evidencia en la visita realizara por el parlamentario andaluz de Podemos, Juan Antonio Gil, a los centros de atención primaria del municipio.

Acompañado por los concejales de Costa del Sol Sí Puede, José Piña y Rafael Herrero, el portavoz en la Comisión de Salud ha constatado las malas condiciones en las que se encuentra el Centro de Salud San Miguel, “masificado y con unas instalaciones deterioradas, mal acondicionadas y antiguas” que no permiten ofrecer una atención adecuada a vecinas y vecinos.

“Desde aquí solicito a los responsables de la gestión sanitaria que, en las mejoras de inversión que han anunciado desde la Consejería, prioricen la situación en la que está el ambulatorio de San Miguel”, ha señalado el parlamentario andaluz que además ha reclamado la contratación del personal comprometido para el centro de La Carihuela.

Son propuestas que Podemos ya presentó en los Presupuestos de la Junta de Andalucía para la rehabilitación integral del Centro de Salud San Miguel y la adecuación de una sala de lactancia o la apertura en horario de tarde de La Carihuela, además de la dotación para prestar los servicios de urgencias.

“Desde al ámbito local lo que deseamos es que haya más recursos, que se destine el dinero preciso para ofrecer una mejor calidad asistencial en Torremolinos. El deterioro del sistema sanitario se ha cebado con la atención primaria y en nuestro municipio lo sufrimos en la saturación que padece el Centro San Miguel”, ha manifestado el portavoz de CSSP, José Piña.

Las enmiendas que no fueron admitidas por el PSOE también incluían la construcción de nuevo centro de atención primaria en Playamar para atender el crecimiento de la población en esta zona residencial y la reforma del Hospital Marítimo.

Es evidente que Torremolinos requiere un plan de mejora ambicioso en la atención primera para que además de subsanar todas las deficiencias que podemos encontrar en las infraestructuras y los servicios, se puedan desarrollar nuevas competencias y funciones.