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Ave no migratoria de 17,5 Cm de longitud el plumaje en la parte superior es de color marrón y blancuzco sucio o amarillentas en la parte inferior. Tiene una cresta en la cabeza larga y puntiaguda que alza o baja cuando está en reposo. El pico ligeramente curvado hacia abajo. Podemos verla con frecuencia al borde de carreteras y carriles de nuestro valle. Se alimenta de semillas y en primavera y verano de insectos como saltamontes, grillos, etc que captura en la tierra.
Habita en terrenos abiertos de secano poco cultivados, desérticos y campiñas. En la época de recolección de cereales se pueden ver en los rastrojos comiendo granos. Prefieren caminar por el suelo llevando bien extendida su llamativa y larga cresta terminada en punta. En nuestro valle la podemos observar en casi todo nuestro entorno a pesar de que cada vez hay menos.
Se reproducen a principios de abril. El nido lo construyen ambos progenitores, normalmente en el suelo junto a algunas matas. Los nidos son muy sencillos recubierto de finas hierbas. Pone entre 3 y 6 huevos manchados de oscuro que eclosionan a los 13 días de incubación. Las crías abandonan el nido a los 10 días y se mueven por el terreno de un lado a otro mientras que los padres los alimentan. Vuelan a los 20 días.
La cogujada en nuestro valle llega a sacar hasta dos nidadas cada año. A pesar de ello cada vez son más escasas, normalmente se suele ver sola. La cogujada común es netamente sedentaria y permanece durante todo el año en un mismo lugar.
En las campiñas y tierras de secanos del Valle del Guadalhorce existe una gran población, aunque observamos que cada vez cuesta mas verlas por lo que nos hace pensar que se está reduciendo en número.
Debemos cuidar del medioambiente para que aves y animales sigan poblando nuestro entorno.
Texto y Fotos: Paco Pacheco
