Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 15 segundos
Soy un lego en estos temas, por tanto, no sé si la siguiente cuestión tendrá algún valor o no. Pero ante el temor social que está aumentando, de delitos contra las personas en la calle, especialmente a mujeres y niños o niñas, me pregunto si la siguiente idea o sugerencia, podría servir de algo, si los expertos en estos temas la perfeccionan.
A. Planteamiento posible.
– Primero.
Como el temor puede ser grande y un número de personas, sea por unas razones o sea por otras, existen situaciones de miedo, por ejemplo, una mujer al ir por una calle a determinada hora, por ejemplo de noche, o al salir del coche en ese espacio hasta llegar a su vivienda.
En este caso, no es suficiente, dicho temor o miedo, para avisar a la policía, para un peligro inminente o un temor muy elevado. Sino diríamos que es ese sentimiento o afecto o percepción en un nivel inferior. Pero no quita de ser un temor y un miedo y un presunto peligro, aunque sea de un nivel bajo.
– Segundo.
Como casi universalmente, niños o ancianos, mujeres, hombres llevan móvil. Que es un instrumento de emisión y de recepción múltiple o con diversas posibilidades o potencialidades.
Me pregunto, si este artilugio podría utilizarse como una forma pasiva y activa de defensa o al menos, para disminuir o solucionar la anterior situación en algún modo.
– Tercero.
Me pregunto si una persona, por ejemplo, una mujer que va por una calle o en una situación ante la que tiene temor, pero no es suficiente como para avisar a la policía para que se personen en el lugar de los hechos.
Dicha mujer, tuviese una tecla especial en su móvil y con ella un número de teléfono, o simplemente un número de teléfono especial grabado en dicha memoria del móvil, que dándole se pondría en contacto con un número de los servicios policiales, locales o nacionales, y ese número que sería especial. Al recibir la llamada, empezaría diríamos a grabar o detectar o ser un preaviso.
Cómo hoy, los móviles pueden saberse en qué lugar están. De forma automática, al recibir esa llamada, a un “número de teléfono especial, diferente a los actuales de aviso o urgencias”. Empezaría diríamos a realizar, por un lado una grabación, sea de la posición, sea incluso del sonido, sea de imágenes desde el móvil de forma automática, sea lo que pueda ser, y al mismo tiempo, ser seguido de alguna manera por los servicios policiales, o al menos grabar su posición durante un tiempo, a convenir, tanto de las posiciones diferentes del móvil y de la persona que es portadora de ese móvil, además ayudado por cámaras que existan de seguridad pública en esos lugares o cercanos a ellos.
– Cuarto.
Cuándo dicha mujer, que es el ejemplo que estamos indicando. Llégase a su vivienda, entrara en ella, se sintiera ya segura. Debería hacer una llamada a ese teléfono especial, para indicar, o para expresar que ya no deben “seguir su rastro”, y por tanto, dicho “seguimiento y grabación de datos o escucha o recepción” se paralizaría y detendría.
B. Cuestiones adyacentes.
Creo que este sistema podría permitir dar mayor seguridad a muchas personas. Especialmente, en determinados lugares o en determinadas horas, determinados sectores de la población, mujeres, niños, etc.
También creo que esto es una idea y sugerencia muy vaga, que considero que los expertos en seguridad y policiales, podrían perfeccionar, de muchas maneras y de muchos modos.
Desde luego, este sistema, tendría que tener la posibilidad de recepción, quizás de docenas de “avisos por temor o miedo”, cada día, especialmente por la noche y en algunos lugares, por lo cual “el sistema de recepción tiene que estar preparado para disponer, de poder recibir, y de la manera que sea seguir y grabar a esas docenas de avisos al mismo tiempo, quizás en las grandes ciudades, algunos cientos…”. Desconozco la cifra potencial posible.
Este servicio de seguridad y policial, que se ofertaría o se ofrecería, puede ser utilizado por la misma persona, en distintos días. No hay límite. Siempre tomado con racionalidad y prudencia, evidentemente.
Se puede y debe intentar, perfeccionando la idea, hacer experimentos en determinados lugares o ciudades, barrios, para ver y analizar las posibilidades potenciales, los resultados, la utilización, etc.
También habría que buscar los modos y maneras, que no se produjeran abusos en la utilización de este servicio potencial o posible de seguridad, etc.
Como toda sugerencia, puede y debe irse perfeccionando con el tiempo, utilizando diversas medidas, desde el “receptor o la persona que da el aviso de miedo o temor”, y al mismo tiempo “también irse complejificando y perfeccionando desde el receptor o receptores policiales”. Por tanto, se pueden completar y complementar, como es obvio con otros medios, cámaras en esos lugares, que pueden ser orientadas hacia un lugar o hacia otro, complementándolos con los datos del móvil y su posicionamiento, in situ por personas de la seguridad que estén cercanos a ese aviso, etc.
Para terminar y no cansar más, simplemente queda enviada y mostrada esta idea o sugerencia, para las personas y las entidades que conocen y saben de este tema, para que la perfeccionen, la valoren y, al menos, la prueben con algún experimento durante unos meses, en algunos barrios, o en algunas ciudades o pueblos. A ver, si sirve para cumplir algunos parámetros, cumplir un aumento de seguridad real y eficiente, y también el aumento de seguridad psicológica de la población y de esos sectores, y si reduce diríamos también los casos de delitos…
http://twitter.com/jmmcaminero © jmm caminero (13 mayo-14 junio 2018 cr).
Fin artículo 1.263º: “¿Idea posible para aumentar la seguridad en la ciudad?”.