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Se trata de una obra de ingeniería extremadamente compleja, ya que parte del vial transcurrirá bajo las vías del tren. Se está trabajando sin interrumpir el paso del Cercanías, por lo que son unos trabajos muy complicados
El nuevo vial contará con una longitud de 450 metros donde se repartirán cuatro carriles y acerados, por lo que será una importante avenida de comunicación interna de esta parte de la ciudad
Uno de los proyectos más importante en materia de infraestructuras de conexión de los últimos años y una obra de ingeniería extremadamente compleja. Esa es la actuación que se está ejecutando en la zona de Carvajal y que servirá para unir la antigua nacional 340 (ahora avenida de Carvajal) con las urbanizaciones del norte de Fuengirola, todo mediante la creación de un gran vial de cuatro carriles que tiene la peculiaridad de que parte transcurrirá por debajo de las vías del Cercanías, en concreto la zona que le dará acceso.
La alcaldesa, Ana Mula, acompañada de la edil Urbanismo, María Hernández, ha realizado esta mañana una visita a estas obras que llevan meses desarrollándose y que ya se encuentran bastante avanzadas. “Estamos hablando de una obra muy complicada, que supone pasar por debajo de una vía del tren mientras que esa vía sigue funcionando. De hecho, tiene unas horas muy limitadas de trabajo, ya que hay que ejecutarlas cuando el Cercanías no está en funcionamiento. “Ni Fuengirola se puede hacer una idea de lo que suponen estas obras de urbanización, ni España entera se puede hacer una idea de lo que conllevan. El ingeniero nos ha comentado que es posible que esta obra sea única en el mundo debido a su complejidad”, ha asegurado la alcaldesa.
El nuevo vial se extenderá desde la conocida como rotonda del Club de Leones, en la avenida de Carvajal, en dirección norte, hasta alcanzar los 450 metros longitudinales. Tal y como contempla el proyecto, habrá dos carriles por sentido, con sus correspondientes acerados y muros de contención. Además, se ha creado una gran estructura que será la que se coloque debajo de las vías del tren. Para ello será necesario hacer unos trabajos muy pormenorizados y complicados, pues esta instalación se irá moviendo paulatinamente, unos dos metros por día, hasta “hincarse” debajo de las vías del Cercanías, y todo ello sin interrumpir el tráfico ferroviario. De esta manera se creará el acceso necesario a esta nueva avenida, que será esencial en la comunicación interna del municipio.
“Es una obra impresionante, muy compleja en su ejecución, muy compleja en su tramitación y con una inversión de casi cinco millones de euros, por lo tanto estamos hablando de unas infraestructuras básicas para esta urbanización”, ha señalado la regidora.
Financiación
En cuanto a la financiación de esta iniciativa, Ana Mula ha explicado que ha sido necesario que los propietarios de esta zona se coordinen para desarrollar la acción. Así, son los promotores de los sectores 1, 2, 3, 4, 6 y parte de Torreblanca del Sol los que se encargan de sufragar estos trabajos que cuentan con un presupuesto cercano a los cinco millones de euros.
“Coordinar a todos esos propietarios para llevar a cabo estas obras era complicado, pero ha sido posible y es ya una realidad. Por tanto, el coste para nuestro Ayuntamiento es cero porque en nuestro Plan General de Ordenación urbana (PGOU) se impuso como una obligación para los propietarios que quieran edificar aquí, porque era importante garantizar esa conexión de todas las futuras viviendas que se van a desarrollar”, ha concluido.