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Las obras ejecutadas por el Departamento de Infraestructuras han supuesto el asfaltado de la calzada, la construcción de escolleras y la instalación de una gran estructura de hormigón armado en su cruce con el arroyo para facilitar el paso del agua
El Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre ha ejecutado una nueva actuación dentro del plan de mejora de las comunicaciones rurales y de reparaciones de los daños causados por las fuertes lluvias de los últimos años. El alcalde, Joaquín Villanova, junto con el concejal de Obras e Infraestructuras, Gerardo Velasco, visitó la zona del llamado camino de Menaya, en la parte norte del término municipal, donde se ha llevado a cabo un proyecto con un doble objetivo: facilitar la circulación de los vehículos y prevenir nuevas inundaciones.
Villanova explicó que se trata de un punto donde habitualmente se registraban desbordamientos, por situarse en el cruce con el paso de un arroyo, el cual quedó prácticamente cegado tras las intensas precipitaciones de 2015. Para arreglar los destrozos ocasionados y prevenir nuevos daños, el Consistorio demolió unos 100 metros lineales de calzada y se procedió a su posterior asfaltado, con el consiguiente ensanche y mejora del firme.
También se han sustituido unos antiguos tubos de hormigón, que se encontraban muy deteriorados, por una nueva estructura de hormigón para facilitar el paso del agua, construida a base de marcos rectangulares de tres metros de ancho y 2 metros de largo. Se trata de un proyecto similar al que se ha acometido en otras zonas de Alhaurín de la Torre, como en el arroyo Blas González o en el cruce del camino del Sesmo (Rico) con la carretera de Zamorilla hacia El Romeral.
En el mismo cauce de este arroyo también se ha ejecutado un muro de escollera hormingonado, faltando por hacer un tramo paralelo a una finca cercana. El proyecto concluirá con la instalación de las correspondientes biondas para garantizar la seguridad vial y, para más adelante, se prevé la construcción de unos diques o balsas de decantación en el curso alto del arroyo, con el objetivo de reducir la cantidad de agua torrencial que llega hasta ese punto.
Las obras están valoradas en unos 50.000 euros. “Este es un puente que habitualmente se desbordaba todos los años y ahora lo vamos a evitar. Nos queda por ejecutar un tramo de escollera y las biondas, pero el resultado ya se nota. Estas actuaciones no se ven, pero son importantísimas para garantizar la seguridad de las personas y de los conductores que pasan por aquí”, ha declarado el primer edil.