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(C.O.) Portugal es un país muy rico en cultura y te invita a conocerlo. Si estás pensando en visitarlo en futuro, atiende a estas curiosidades sobre nuestro país vecino:
- El gallo de Barcelos
Barcelos es una pequeña localidad de Braga, en la que una noche entraron a robar, coincidiendo con la llegada de un peregrino, al que culparon. Cuando estaba ante el juez, que iba a degustar un gallo, el peregrino proclamó su inocencia y presentó como prueba que el animal cantaría al ahorcarle. Así fue, el gallo se levantó, estiró alas y cantó. El peregrino fue liberado y, desde entonces, este gallo ha sido el símbolo de la justicia en Portugal.
- El “portunhol”
Es un fenómeno lingüístico, que nace de la unión de dos idiomas (portugués y español) para formar otro como híbrido de ambos, y se habla en las fronteras de España y Portugal. Su origen se remonta a los primeros hispanohablantes que llegaron a tierras portuguesas, encontrando el idioma complicado, y simplificando, entonces, sonidos y vocablos.
Sin embargo, para entenderse con los portugueses, lo mejor es aprender el idioma oficial. Aunque existen otros métodos más tradicionales de aprendizaje, con una buena plataforma web especializada aprender portugués te resultará más fácil y divertido. Existen muchas webs, plataformas y aplicaciones útiles que no se limitan a dar el clásico curso de portugués, sino que incorporan múltiples recursos para facilitar el aprendizaje, como Babbel, que incluye un práctico diccionario de portugués para comprobar y profundizar el conocimiento del léxico.
- Vino verde
Se elabora con uvas cultivadas solo en la región de Minho. Sin embargo no es de color verde y ni siquiera se produce con uvas verdes. Se llama así porque es verde como el campo que rodea sus viñas, que crece bajo un clima lluvioso que permite el cultivo de esa uva con la que se elabora este vino, y por último se llama así porque alude a la juventud de la materia prima empleada en su elaboración, es decir unas uvas apenas maduras. Se bebe muy frío y es bueno para acompañar carnes, pescados o mariscos, o simplemente para tomar en el aperitivo.
- El fado
Es el estilo musical que encarna el fatalismo portugués, ya que canta con tristeza lo que se fue, como el imperio perdido, la patria que pudo ser y al hombre que perdió su gloria.
Es un genero nacido en los barrios humildes de Lisboa, y es cantado habitualmente por un solista acompañado por una guitarra portuguesa y una guitarra acústica.
Sus raíces vienen de África, de los árabes y de la antigua Lusitania. En 2011 fue incorporado por la UNESCO a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, ya que reconoció que se trata de una manifestación de identidad cultural que permite la interacción creativa con otras tradiciones musicales vivas.
- Los azulejos
Portugal es uno de los grandes exponentes universales del arte de la azulejería desde el siglo XV. Los azulejos forman parte de su legado histórico-artístico de Portugal y tienen una tradición muy antigua. Los musulmanes los trajeron a la península ibérica cuando la conquistaron en el 711 y Portugal los adoptó a partir del siglo XV para utilizarlos en la decoración de los suelos y de las paredes de los castillos y palacios reales.
A mediados del siglo XVI empezó la producción de azulejos en Portugal. Esta industria se ha mantenido entre las más importantes del país y aún hoy sigue exportando al mundo entero y es uno de los símbolos artísticos del país.
En el siglo XVIII los azulejos ya representaban uno de los principales elementos decorativos en iglesias, conventos, palacios, casas, jardines, escalinatas y fuentes.
- La librería más antigua y pequeña del mundo
La librería más antigua del mundo está en Lisboa y es la librería Bertrand, que abrió sus puertas en 1732, y desde entonces por su interior pasó la mano la mayor parte de los intelectuales lisboetas. En el siglo XIX en su interior se organizaban animadas tertulias en las que participaba uno de los autores más famosos de Portugal, Eça Queirós.
También la librería más pequeña del mundo se encuentra en Lisboa, y tiene más de 3.000 libros en tan sólo 3,8 metros cuadrados. Se trata de la librería de las escaleras de Sao Cristovao, situada en la popular baja de Lisboa. Su dueño, Carneiro, desde hace casi un década, vive rodeado de miles de libros, de los que conoce todos los títulos, escritos en portugués, italiano, español, inglés, chino, japonés.
¿Te han gustado estas peculiaridades? Pues te invitamos a visitar Portugal y descubrir algunas más. ¡No te arrepentirás!
