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El proyecto, con un presupuesto base de licitación de 88.145 euros y un plazo previsto de ejecución de 2 meses, tiene por objetivo la protección y puesta en valor de este histórico monumento, representativo de la arquitectura militar nazarí del siglo XIV
El Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre ha publicado la licitación del contrato para la ejecución de obras de consolidación, mejora y protección de la torre de Torrealquería, uno de los monumentos más antiguos del término municipal y símbolo de la barriada del mismo nombre. El proyecto ha salido a concurso con un presupuesto base de 88.145,6 euros (impuestos incluidos) y un plazo de ejecución previsto de dos meses.
La objetivos son garantizar su conservación, evitar la aparición de futuras patologías en la estructura, eliminar elementos y añadidos inadecuados y avanzar en el conocimiento de esta histórica torre, catalogada como BIC (Bien de Interés Cultural) de acuerdo con la Ley de Patrimonio Histórico Español, y enmarcada dentro del emplazamiento, conocido como Cortijo Mollina.
Esta intervención se enmarca dentro del plan del alcalde, Joaquín Villanova, para la puesta en valor de todo este entorno, situado en una ubicación geográfica privilegiada y que goza de un especial interés histórico y arqueológico por los numerosos restos hallados por parte de civilizaciones pasadas, desde romanos a musulames, y, también, por ser el lugar donde fueron apresados el general liberal José María Torrijos y sus tropas en 1831.
La torre en sí es una estructura muy representativa de la arquitectura militar nazarí típica del siglo XIV, aunque no hay certeza sobre la fecha exacta de su construcción. El proyecto ha sido redactado a través de la Concejalía de Patrimonio Histórico-Artístico que dirige Marina Bravo y se ha podido sacar a concurso después de la correspondiente autorización de la Junta de Andalucía.
Se trata del vestigio más importante que se conserva en esta zona, ya de por sí de gran riqueza arqueológica, ya que se han hallado numerosos restos que hacen pensar en la existencia durante muchos años de una población estable. Es un tipo de construcción de naturaleza defensiva que era habitual en los campos andalusíes de la época y que se asociaban a núcleos rurales establecidos en alquerías. Servían no solo para ofrecer unas adecuadas garantías de vigilancia, sino también para proteger a los campesinos en caso de peligro.
En la actualidad, la torre medieval de Torrealquería presenta diversos problemas fruto del abandono y el estado degradado de la fábrica, lo que justifica la intervención que ahora se ha licitado. Hay que tener en cuenta que la fortificación dejó de tener uso defensivo desde la Edad Moderna, cuando pasó a desempeñar tareas relacionadas con la explotación agrícola en la que quedó integrada. Una vez que finalizó esta actividad, quedó abandonada y en estado de ruina, debido también al expolio y la reutilización de sus restos como material constructivo.
Se conservan dos niveles de la torre, con una altura máxima de 7 metros y fuertes muros de carga perimetrales de hasta 2,50 metros de espesor. La intervención que se plantea incluye el desbroce general y limpieza de la vegetación parásita, el saneado puntual de las fábricas de mampostería y ladrillo, la eliminación de sustratos superficiales y morteros con sistemas poco agresivos o la reposición de elementos precisos donde haya oquedades, entre otros trabajos. Esta obra se sumará a las recientes actuaciones arqueológicas impulsadas por el Ayuntamiento en este área, entre ellas el descubrimiento de una antigua necrópolis, el hallazgo de lo que se cree que en su día fue la desaparecida Capilla de Santa Ana de Torrealquería y otras excavaciones que sirvieron para sacar a la luz la planta de una antigua vivienda y piezas de cerámica o de pulseras.