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La institución provincial destinó 85,5 millones de euros para mejoras en los pueblos de la provincia
Durante el año pasado se realizaron inversiones por valor de 59,3 millones de euros, el 77% de las previstas
El remanente de tesorería se sitúa en 33 millones de euros y el superávit ha sido de casi 20 millones de euros
La Diputación de Málaga cerró 2018 con un récord en las transferencias a los municipios de la provincia, que alcanzaron los 85,5 millones de euros, lo que supone un 37% del presupuesto total de la institución. Igualmente, logró una ejecución presupuestaria del 86%, la más alta de los últimos 14 años.
El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha realizado hoy un balance de la liquidación de las cuentas del año pasado, que arroja unos resultados que ha calificado de históricos, unidos al hito de alcanzar la deuda cero con las entidades financieras.
En este sentido, ha asegurado que la gestión económica que se ha llevado a cabo en desde 2011 «ha permitido que la Diputación de Málaga sea una institución saneada, que inyecta y apoya económicamente a los municipios más pequeños de la provincia, que ayuda a la generación de riqueza y empleo a través de las inversiones y que cumple con creces con sus proveedores».
Salado ha destacado que la ejecución del presupuesto de 2018 se elevó a casi el 86%, el porcentaje más alto de los últimos 14 años, lo que ha considerado como «el mejor indicador de que se hace una buena gestión de los recursos y del gasto público y de que se cumplen las previsiones iniciales».
El gasto reconocido en 2018 fue de 246,5 millones de euros, de los que 24,3 millones de euros se destinaron para liquidar la deuda con los bancos.
Esfuerzo inversor
Además, se ha referido al esfuerzo inversor realizado por la institución provincial, con un grado de ejecución que alcanzó el 77,2% de las inversiones previstas, 20 puntos más que en 2017.
En total, durante 2018 se invirtieron 59,3 millones de euros, de los que 49,3 millones de euros se destinaron a mejoras de infraestructuras y equipamientos de los municipios. Y otros 10 millones de euros se emplearon en el arreglo de carreteras y en actuaciones en edificios del patrimonio provincial.
Desde 2012, se han ejecutado en la provincia inversiones de la Diputación por valor de 444,3 millones de euros, de los que 377,9 millones se han dedicado directamente a los pueblos. «De esta forma, queda claro que esta institución es la que más invierte en la provincia», ha incidido Salado.
Apoyo económico a los municipios
El presidente de la Diputación ha resaltado que en 2018 se ha batido un récord en el apoyo económico a los municipios, con pagos por un importe de 85,5 millones de euros, lo que supone la mayor inyección económica a los pueblos de la provincia en la historia de la Diputación.
Desde 2012, se han transferido a los municipios 477 millones de euros, es decir, una media de 68 millones de euros al año. En anteriores legislaturas, la media anual se situaba en 42 millones. Así que, en los últimos años, los pueblos han recibido anualmente 26 millones de euros más que antes.
«Gracias a este notable incremento de las transferencias de recursos -ha precisado Francisco Salado- , hemos contribuido a mejorar la situación económica de las entidades locales menores de 20.000 habitantes».
Pagos a proveedores
En cuanto a la relación con los proveedores, el periodo medio de pago se situó en 20 días. Durante el año pasado, se atendieron pagos a proveedores por un importe de 50 millones de euros, la cantidad más elevada desde 2012. Y en los últimos siete años los pagos por contratación de obras, suministros o servicios suman 290,5 millones de euros.
El balance de la liquidación arroja también otros indicadores positivos, como el hecho de haber logrado un remanente de tesorería que se ha situado en 33 millones de euros y un superávit de casi 20 millones de euros.
Al respecto, Francisco Salado ha comentado que «el propósito es destinar estas cantidades a nuevas inversiones, pero siempre dentro de los límites que nos marca el techo de gasto presupuestario».
