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Teatro Lírico Andaluz triunfa con su espectacular puesta en escena, con más de 50 músicos, orquesta sinfónica y un despliegue técnico y logístico muy celebrado en la grada
(Prensa Ayto Alh Torre) Anoche, un público compuesto por espectadores de mediana y de la tercera edad pudo disfrutar del espectáculo de zarzuela ‘Agua, azucarillos y aguardiente’ de la mano de la compañía Teatro Lírico Andaluz, un clásico por estos lares.El auditorio al aire libre de la Finca Municipal El Portón fue escenario del gran despliegue artístico, técnico y logístico que requiere la representación de este tipo de obras. Así, sobre el escenario se recrearon las fachadas de época, el quiosco del aguaducho, en torno al cual se suceden los enredos, y entró en escena el elenco de actores, caracterizado con la indumentaria del Madrid más castizo del siglo XIX.
El gran elenco de interpretes y cantantes estuvo arropado por una orquesta sinfónica para dotar de mayor envergadura a este espectáculo músicoteatral. Un montaje que permitió disfrutar al público del lenguaje popular y chulapo y los enredos cómicos propios de este género dramático y musical de ambiente decimonónico.
La concejala de Cultura, Jéssica Trujillo, valoró la impresionante puesta en escena para este montaje de zarzuela, la calidad artística de la compañía, que lleva más de una década visitando nuestro municipio, y la acogida que recibió por parte del público de Alhaurín de la Torre: “El despliegue ha sido magnífico y ha venido bastante gente, más o menos tres cuartas partes del adoro. Hay personas que han estado comprando la entrada hasta última hora. La zarzuela tiene un público muy fiel, muy concreto que ha venido buscando esta clase de espectáculo, con orquesta sinfónica y más de 50 actores sobre el escenario. Es un tipo de espectáculo que se aprecia mucho”.
‘Agua, azucarillos y aguardiente’ es una obra del llamado género chico con música de Federico Chueca y libreto de Miguel Ramos Carrión. Es una de las zarzuelas más representadas de la historia. Estrenada en 1897, es un viaje al Madrid castizo de los chotis, con numerosos personajes que conforman un divertido sainete para el espectador.
La acción se desarrolla en un puesto de refrescos de Madrid en agosto. El argumento gira alrededor de un enredo de carácter económico en el que están implicados, sin saberlo, los protagonistas. A lo largo de la obra va apareciendo el tema amoroso, la seducción, los apuros económicos, los celos, el timo y la nostalgia, para terminar con un pasacalle de chulapos y chulapas en homenaje a la verbena de San Lorenzo.
Preguntado acerca del motivo por el que esta obra se ha representado tantas veces, Pablo Prados, director de la obra y gerente de la compañía malagueña Teatro Lírico Andaluz, afirmó: “Como los grandes títulos de ópera, cuando un título es bueno, como La Traviata o como Rigoletto, pues es normal que se repita. Es una obra de una extraordinaria calidad artística y además muy divertida en cuanto al libreto.” A lo que añadió: “Es como los clásicos. No nos cansamos de escuchar un clásico de pop de los Beatles o de los Rolling Stones, y aquí pasa lo mismo. Solamente que es otro género musical. Pero realmente es una joya musicalmente y desde el punto de vista del libreto y por eso se representa en tantísimos teatros”.