La reserva de los araras se encuentra en la cuenca del Xingú, donde la COVID-19 afecta en estos momentos a decenas de comunidades indígenas. Se sabe que algunas de las reservas de la zona están habitadas por tribus no contactadas, los pueblos más vulnerables del planeta.
«Estamos muy preocupados. En el puesto de salud [cercano a la aldea] no hay medicinas, ni respirador. Queríamos un respirador para no tener que ir a la ciudad», ha declarado un hombre arara a Survival. «La aldea está a tres días de distancia de la ciudad, donde se encuentra el hospital. Pedimos protección para estos casos de coronavirus. El número de invasores ha aumentado mucho, están cortando mucha madera. El Gobierno no los está deteniendo. Hay demasiados invasores en el área».
Los araras exigen la expulsión inmediata de todos los invasores de su territorio y una respuesta íntegra de atención sanitaria para evitar muertes. Sus aliados, incluida Survival, están presionando al Gobierno brasileño para que adopte medidas urgentes. |