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Francisco Salado resalta el compromiso de la institución provincial con el trabajo que desarrollan las entidades sociales de la provincia, a las que se destinan este año diversas líneas de ayuda que suman 1,8 millones de euros
(Prensa Diputación) La Diputación de Málaga ha reconocido a la Asociación Madre Coraje la labor que realiza de ayuda a comunidades desfavorecidas con la entrega del Premio de Solidaridad Internacional y Derechos Humanos que anualmente convoca la institución provincial a través de la Delegación de Mayores, Tercer Sector y Cooperación Internacional.
El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha hecho hoy entrega del premio, correspondiente a la convocatoria de 2019 y dotado con 10.000 euros, a la delegada en Málaga de la Asociación Madre Coraje, Miriam Rein. En el acto también han estado presentes la vicepresidenta cuarta y responsable del Área de Ciudadanía y Atención al Despoblamiento del Territorio, Natacha Rivas; el diputado de de Mayores, Tercer Sector y Cooperación Internacional, Francisco José Martín; y el gerente de la asociación, Avelino Mañas.
Salado ha destacado el trabajo de esta entidad, que cuenta con sede en Málaga desde hace casi 20 años, desde la que se canalizan proyectos e iniciativas solidarias. En este sentido, ha reconocido la implicación de Madre Coraje para contribuir al desarrollo de comunidades empobrecidas del Perú andino y Mozambique con proyectos relacionados con la economía, la educación y la gobernabilidad y ciudadanía, velando a su vez por la igualdad de género, la identidad cultural, el fortalecimiento organizativo y el cuidado del medio ambiente.
Igualmente, ha valorado que esta asociación lleva desde sus inicios apostando por el respeto medioambiental centrado en el reciclaje, realizando la recogida de diferentes materiales para su posterior reciclaje o para su reutilización, como aceite, ropa, material sanitario, juguetes, libros, material escolar y menaje.
El presidente de la Diputación ha incidido en que «uno de los valores más preciados que debemos seguir cultivando como sociedad es el de la solidaridad, el apoyo a quienes viven situaciones difíciles o comprometidas. Y Málaga es un ejemplo de provincia solidaria, generosa, no solo con quienes nos rodean y están más cerca de nosotros, sino también con personas de otros países y territorios».
Ha resaltado que la cooperación internacional, centrada en aspectos como la sanidad, la educación, la empleabilidad, el medio ambiente y la lucha contra las desigualdades, es necesaria y fundamental para corregir los grandes desequilibrios de nuestro Planeta.
Y se ha referido al compromiso de la Diputación de Málaga con la cooperación internacional, que se refleja tanto con la concesión de este Premio como también con las líneas de ayuda, cuantificadas este año en 510.000 euros, que se establecen para organizaciones que llevan a cabo proyectos de cooperación para el desarrollo, acciones humanitarias y de derechos humanos, y otros relacionados con la sensibilización y educación para el desarrollo.
Por su lado, Miriam Rein ha agradecido no solo el galardón, «que anima a seguir luchando y trabajando con más ahínco, sino también las ayudas a los proyectos que presentamos a todos los programas de cooperación, que han permitido realizar nuestras acciones, ya que, sin vuestro apoyo y cofinanciación, no sería posible acometerlas».
Rein ha incidido en la importancia de los proyectos para las mujeres. «En Perú y en Mozambique -ha explicado- la mujer es la que trabaja, la que realiza las tareas del hogar, la que trabaja la tierra, la que va al mercado y la que se ocupa de todo. Y encima es maltratada. Por lo tanto, el género está en todos nuestros programas, independientemente de que tengamos programas educativos, de gobernanza o de cuidado de la tierra. Ese aspecto, como el de la infancia, Madre Coraje lo tiene muy presente».
Líneas de ayuda a entidades sociales y asociaciones
Francisco Salado ha ensalzado la labor que realizan las asociaciones y las entidades sociales, como un pilar fundamental para el desarrollo, el progreso y la articulación de la sociedad, capaz de llegar adonde no pueden alcanzar las administraciones públicas. «Nunca estaremos lo suficientemente agradecidos a las asociaciones y las organizaciones sociales por el trabajo que realizan, sobre todo en situaciones críticas y difíciles, como las que está provocando la pandemia este año», ha recalcado.
Al respecto, ha recordado que la institución provincial apuesta por seguir fortaleciendo el tejido social poniendo a disposición de las entidades sociales malagueñas programas de ayuda por valor de 1,8 millones de euros para que puedan seguir realizando la loable labor que desarrollan.
En los últimos años, a través del Premio de Solidaridad Internacional y Derechos Humanos se ha reconocido el trabajo de entidades como Prodiversa-Progreso y Diversidad, la Asociación Andaluza por la Solidaridad, Cooperación Honduras, la Fundación Coprodeli e Iniciativa Internacional Joven, así como la labor del sacerdote malagueño Francisco Olveira.
Hasta el viernes próximo, día 18, está abierta la presentación de candidaturas para la convocatoria del premio de este año.
