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Los socialistas recriminan a ambas administraciones que se pasen la pelota del arreglo de la rotura de una valla por la que los visitantes acceden desde la carretera, poniendo en peligro sus vidas, además de permitir las masificaciones de cada fin de semana sin controlar el aforo, asustando a las aves por exceso de ruido y generando basuras que llegan al cauce
Gabinete de Prensa del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Málaga El Grupo Municipal Socialista ha criticado «el estado de abandono al que han sumido tanto el Ayuntamiento como la Junta al entorno natural del paraje de la desembocadura del Guadalhorce en la ciudad de Málaga». Durante una visita a este lugar, la viceportavoz socialista, Begoña Medina, y el concejal Salvador Trujillo han comprobado cómo ninguna de estas administraciones han puesto en marcha las medidas de reparaciones de una valla rota por la que entran los visitantes el entorno, «un paso inadecuado porque se accede desde la carretera MA-22», a la altura del estadio de atletismo Ciudad de Málaga, junto al Martín Carpena, y que «pone en serio peligro la integridad de las personas porque tras atravesar este hay un terraplén», ha expresado la viceportavoz socialista.
A través de un escrito, el concejal Salvador Trujillo ha preguntado al Ayuntamiento de Málaga si tiene conocimiento sobre esta rotura la una valla por la que los visitantes entran en el paraje natural. La respuesta del área de Movilidad ha sido literalmente que «no tiene constancia del paso abierto en la valla que delimita el entorno del Paraje Natural de la Desembocadura del Guadalhorce, a la altura del campo de atletismo junto al estadio Martín Carpena» y que ingnora «si la valla es de titularidad de la Junta de Andalucía». Para el edil socialista, «esto es síntoma de que tanto Ayuntamiento como Junta se pasan la patata caliente para garantizar la seguridad de malagueños y visitantes que acuden al paraje». Es cierto que a través de una valla no se debería acceder, porque las personas se ponen en peligro ellas mismas. «Pero ni el gobierno de Paco de la Torre ni el de Moreno Bonilla deberían hacer dejación de funciones sobre este asunto».
Sobre la seguridad sanitaria en el paraje natural también se ha pronunciado la viceportavoz socialista, Begoña Medina. «La construcción de la pasarela del Guadalhorce ha hecho un efecto llamada que concentra cada fin de semana a centenares de personas en el entorno natural, sin un control de aforos y permitiendo las aglomeraciones. Se lo pedimos tanto al Ayuntamiento de Málaga como a la Junta de Andalucía hace meses, pero nadie controla que haya un tránsito fluido en la pasarela». Además, la socialista, que también es la responsable en su grupo del área de Sostenibilidad Medioambiental, advierte de que «cuando hay grandes grupos de personas el exceso de ruido molesta a las aves, además de acumularse basura junto a los márgenes de la desembocadura. Si hay control de aforos, estas cosas se pueden controlar», ha apostillado.
«En nuestra última visita hemos visto acumulación de basura como bolsas, briks, botellas de plástico e incluso mascarillas esparcidas, grafitis en la cartelería, vallas de protección forzadas, señales destrozadas, personas que se salen de los senderos para llegar a la orilla del rio asustando a las aves», ha agregado Begoña Medina. Además, la viceportavoz socialista pidió durante la Comisión de Sostenibilidad Medioambiental de noviembre de 2020 que se intensificaran las labores de limpieza de esta maravilla de la naturaleza de 67 hectáreas, declarada Parque Natural en el año 1989. «Estamos a la espera de una respuesta por parte del equipo de gobierno», ha zanjado Medina.
