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Unidas Podemos apoya la huelga iniciada por el personal de la cafetería de Parcemasa ante los “impagos” de la empresa y la “situación de precariedad” que vive la plantilla
(Nota de prensa Unidas Podemos) Unidas Podemos muestra su apoyo a la huelga iniciada por los trabajadores y trabajadoras de la cafetería de Parcemasa y para la que argumentan “el incumplimiento del convenio y los impagos por parte de la empresa y la situación precaria que vive la plantilla”.
La concejala y viceportavoz de la formación en el ayuntamiento de Málaga, Remedios Ramos, recuerda que “la plantilla además de no cobrar las últimas nóminas sigue sin que le abonen las pagas extras y los conceptos salariales que les corresponden según marca el Convenio Provincial de Hostelería de Málaga, como la nocturnidad, la compensación de días festivos, los pluses de distancia, etc.”, y abunda que “a día de hoy la situación se ha recrudecido por parte de la empresa por su actitud hostil que niega derechos elementales a la plantilla”.
“Hay que rescatar esta concesión de Parcemasa a una empresa incumplidora que solo busca el negocio y saquear de todas las formas posibles el dinero que consigue a través de la cafetería, es inadmisible este incumplimiento del convenio y del pliego de concesión de la cafetería, en manos de una subcontrata pirata, y que no se paguen a unas familias trabajadoras los salarios y pagas extras que les deben, unos 150.000 euros aproximadamente en total”, argumenta la concejala.
“Por otra parte, el equipo del gobierno del PP se lava las manos y no piensa actuar, no hacen nada respecto a los incumplimientos de la adjudicataria pese a que los mismos están afectando a la calidad del servicio ofrecido a los usuarios y usuarias que presta la cafetería de Parcemasa en momentos muy dolorosos de su vida”, apunta Ramos.
El concejal de la confluencia, Nico Sguiglia, señala que “la situación de Parcemasa es una muestra de la gestión que hace el PP de los organismos municipales: sueldos galácticos a los gerentes, subcontratas que precarizan a los trabajadores y dan un mal servicio a los ciudadanos. Se trata de un modelo bueno para unos pocos y pésimo para la mayoría”.
