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Carmen Crespo valora que «por fin se acabe la injusticia que sufría la flota andaluza» al unificarse las paradas, medidas técnicas y horarios de faena
La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha valorado que «por fin se acabe con la injusticia que sufría la flota andaluza» que, en su compromiso con la sostenibilidad de las pesquerías, «cumplía con unas paradas biológicas dirigidas a facilitar la regeneración de los caladeros que los barcos portugueses no respetaban». «Hasta ahora, cuando nuestras embarcaciones se quedaban amarradas para garantizar la continuidad de los recursos pesqueros del Golfo de Cádiz, los pescadores de Portugal seguían faenando», ha explicado Crespo, que ha mostrado su alegría por el hecho de que, «a partir del 1 de enero de 2022, no vuelve a tener lugar este desequilibrio entre las flotas pesqueras de España y Portugal».
La obligación de respetar las mismas vedas biológicas y medidas técnicas es una de las novedades que incluye el acuerdo alcanzado entre ambos países para crear las condiciones adecuadas para el acceso recíproco de las flotas de España y Portugal a las aguas bajo soberanía o jurisdicción del otro país. Asimismo, los barcos pesqueros deberán cumplir los horarios de pesca establecidos por la otra nación. Inicialmente, este acuerdo alcanzado entre el reino de España y la república portuguesa permanecerá en vigor cinco años, que podrían extenderse a siete.
La responsable de Pesca en Andalucía ha explicado que esta situación «afecta directamente a unos 40 barcos y una decena de mariscadores profesionales de Andalucía». En total, la flota española que faena en aguas portuguesas asciende a 39 embarcaciones de arrastre (25), cerco (12) y trasmallo artesanal (2) que tienen puerto base en el litoral andaluz. A estos barcos se suman 10 licencias de marisqueo para capturar coquina de forma artesanal, es decir, con arrastre de cintura.
Por otro lado, Carmen Crespo ha lamentado que, actualmente, los barcos de Portugal «están consumiendo parte de la cuota española de especies como el boquerón y la sardina, y las autoridades española y portuguesa, a pesar de tener conocimiento de la situación, no hace nada para remediarlo». «Faenan en el Golfo de Cádiz con sus barcos y restan posibilidades a los españoles al asignar las toneladas a nuestro Total Admisible de Capturas (TAC) en lugar de contabilizarlo como en el TAC portugués», ha comentado la consejera, que ha calificado esta forma de actuar como «otra injusticia más que daña a un sector muy vulnerable y necesitado de mayor respaldo por parte del Gobierno central».