Dueños y Señores de tierras robadas. ¿Otra COP más…?

J Híades Galán

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Las tierras de los pueblos pluriétnicos no existen, fueron robadas mediante leyes incorrectas, para favorecer las influencias de unos cuantos corruptos.

Las pérdidas territoriales y enajenación de recursos ambientales son una realidad que arrastran multitud de cadáveres asesinados impunemente por defender su territorialidad y propios derechos de vida.

La estrategia de acumulación de tierras, el despojo de familias campesinas, la presión de los señoritos latifundistas para lograr su acaparación territorial, los ajustes legislativos para otorgar licencias fraudulentas a fin de facilitar la explotación de recursos mineros y forestales en terrenos colectivos de pobladores indígenas…vienen logrando que los campesinos no cuentan en la actualidad con ninguna fórmula legal de acceso a la propiedad colectiva de la tierra.

Las reservas campesinas que eran una defensa de la propiedad campesina y un obstáculo para la expansión de latifundios a costa de tierras campesinas, no han recuperado aún su vigencia. Los actores armados, mantienen el control de todos estos espacios logrando que su economía legal e ilegal sea vital para mantenerse en la guerra.

Los bosques naturales desaparecen ante los cultivos agroindustriales…La destrucción de la flora y fauna, la contaminación de ríos con residuos químicos y fumigaciones, vienen deteriorando los territorios colectivos.

La incapacidad y desgano de los estados es un hecho, así como su implicación en todo éste proceso de corruptelas; la hegemonía de grandes grupos económicos campean a sus anchas.

La violencia y el desplazamiento forzado colocan en peligro de extinción a muchos pueblos indígenas. Los más afectados han sido aquellos que no tienen titulo de los territorios que tradicionalmente habitan. Las clientelas políticas dividen a la población,  y con ello facilitan todo el derrumbe social y territorial.

Lo ilícito se expande vertiginosamente a la sombra de gobiernos corruptos que amparan leyes incorrectas para que la justicia no pueda ser aplicada…el empoderamiento de actividades extractivas y económicas ilícitas encuentran el apoyo de corrientes políticas y propios estados,  todo ello, a espaldas del pueblo soberano.

No nos extrañe pues que la evasión fiscal, el contrabando, la posesión ilegal de la tierra, el robo y apropiación privada de los bienes y recursos públicos, el caciquismo, las elecciones fraudulentas, la compra de votos, el secuestro y  el propio narcotráfico, con todas sus secuelas de corrupción y violencia, han terminado por desestabilizar los gobiernos locales y des-institucionalizar todas las regiones allá donde actúan…, es decir, más claro aún,  la acción ilegal de los grupos y bandas criminales se encuentran actualmente mundializado, de ahí que no se estén dando soluciones prácticas y reales a ninguna de las cuestiones que nos mueven este tipo de reuniones como las COP, los 15 principios al comienzo del milenio sin lograr cumplir ni uno solo…etc.

Por esta continua falta de ejecución práctica de acuerdos firmados,hoy día nos movemos con miedo, incertidumbre e inseguridad, con recelos y desconfianza a niveles globales…la voluntad y propia conciencia política se encuentran secuestradas y compradas por las élites económicas del mundo…y eso no puede ser.

LO QUE NO QUEREMOS ¿PARA QUÉ LO TENEMOS?

— desde Universal Global de Ediciones de acceso gratuito -obras para pensar y abrir conciencia- en www.escuelaabierta.eu y www.universalproyecto.org

-Obras en formato escrito. Gracias por divulgar—http://escuelaabierta.eu/…/universal-global-de-ediciones/