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Para el año que comienza, la Asociación de Hoteleros de la Costa del Sol se marca el objetivo de alcanzar un 77% de ocupación, superando así en un 2% los resultados del año de referencia
Tras las campanadas, toca hacer balance del ejercicio que se cierra. Solo analizando las luces y sombras del sector se pueden superar los resultados. Es lo que ha hecho la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos), cuyo Comité Ejecutivo, tras analizar detenidamente los datos recogidos a lo largo de los últimos doce meses, considera que “2022 ha sido, en general, un año positivo”.
El último ejercicio se zanja así con una ocupación del 70,75%, lejos aún del 75,62% del 2019, año de referencia del sector. En medio se quedan dos años para el olvido, donde un sector vapuleado por las incesantes olas de coronavirus no conseguía remontar: hay que recordar que en 2020 la ocupación descendió a niveles nunca vividos (28%) y en 2021 este porcentaje no llegó a duplicarse (47,65%).
2022 arrancó con datos preocupantes, tanto es así que el primer trimestre del año pasado cerró un 15% por debajo de 2019. En cambio, el segundo trimestre mantuvo un comportamiento ligeramente inferior, pero cerca de las cifras habituales para dicha época del año: abril cerró con un 72,54% frente al 74,11% de 2019; mayo con un 78% en ambos años; y junio con un 81,80% frente al 83,78% de 2019.
El repunte de 2022 coincidió con la temporada alta del año, el verano. En julio se superó por primera vez la ocupación de 2019 y cerró el mes con un 86,29%; agosto con un 88,08%; y septiembre con un 87,11%.
El último trimestre, marcado por un tiempo aún estival, comenzó con buenos índices de ocupación: un 81,74% en octubre y un 64,80% en noviembre. Sin embargo, diciembre no ha dejado las cifras ascendentes deseadas y ha cerrado con un 52,16%, frente al 55,13% de 2019.
Estos son, a grandes rasgos, los datos generales que arroja un año en el que el sector ha tenido que hacer frente a incontables obstáculos y ha tenido que reinventarse y ajustarse a las necesidades del mercado para remontar.
“Ha sido un año bueno en cuanto a ocupación, pero no ha sido un ejercicio fácil de gestionar. Cuando parecía que la crisis sanitaria daba sus últimos compases, el estallido de la guerra en Ucrania puso al mundo patas arriba y las consecuencias socio-económicas continúan sacudiendo al sector; a lo que hay que sumar otras dificultades como la creciente inflación de alimentos y la energía, las constantes huelgas y retrasos en los principales aeropuertos y la subida de los tipos de interés, entre otras cuestiones que no podemos perder de vista en este nuevo ejercicio para tomar las mejores decisiones”, reflexiona el presidente de Aehcos, José Luque.
Retos para 2023
Para 2023, Aehcos tiene como objetivos principales alcanzar una ocupación del 77% -lo que supondría superar en un 2% el año de referencia- y recuperar mercados tradicionales que no han tenido el comportamiento deseado en el último ejercicio como han sido el británico, alemán, francés o irlandés, entre otros.
Los hoteleros se marcan estos retos conscientes de las nuevas preocupaciones que generan gran incertidumbre en el sector como es el rebrote de Covid que está padeciendo China y del que aún se desconoce cómo afectará al resto de países.
Existe otro reto recurrente y que pone en jaque desde hace tiempo a los hoteleros de la Costa del Sol: la falta de personal en el sector turístico, así como la escasez de viviendas para los mismos. “Necesitamos el apoyo de las administraciones para subsanar esta problemática, de manera que consigamos hacer del problema una oportunidad y seamos capaces de convertir a España y a la Costa del Sol en una potencia para la formación acreditada en materia turística, especialmente en la hostelería y la restauración”, afirma el Comité Ejecutivo de Aehcos.
En este sentido, el Comité abunda en la necesidad de que las administraciones se involucren y aporten soluciones para que los trabajadores tengan acceso a una vivienda, un aspecto que año tras año genera una gran problemática.
Por ello, puesto que 2023 será un año de elecciones locales, provinciales y generales, Aehcos solicita que las administraciones de todos los ámbitos establezcan una hoja de ruta clara, precisa y comprometida para que el turismo sea considerado en España como una verdadera industria, con responsables públicos profesionales y grandes conocedores capitaneado el sector.
“No podemos olvidarnos de que somos grandes generadores de riqueza y empleo y, sin embargo, hay temas enquistados que no nos permiten alcanzar la competitividad que deseamos. Los hoteleros estamos haciendo grandes esfuerzos por adaptarnos a las demandas y exigencias del mercado, por ser más sostenibles, por buscar soluciones y formar personal, pero hay otras cuestiones que no están en nuestras manos y nos impiden posicionarnos como destino líder. Hablamos de la calidad de nuestras playas -uno de nuestros grandes valores y que, sin embargo, tienen una situación crítica. Hablamos de dificultad en la movilidad por carretera de municipios con gran atractivo turístico. Hablamos de mejores infraestructuras y cobertura para las zonas del interior de la provincia y, como el principal reto: hablamos de preocupación por la escasez de agua en nuestros embalses, un bien primario que necesita dotarse de infraestructuras modernas para contrarrestar las escasas precipitaciones. Necesitamos soluciones para que la Costa del Sol sea un destino pionero, un destino único”, asevera José Luque.
“El sector turístico, dentro de los índices macro económicos, ha dejado claro durante estos años que ha sido una industria resiliente, prueba de ello además, es que ha sido una tendencia mundial respecto a otros sectores de las economías, y en el caso claro de nuestro sector hotelero en la Costa del Sol, estos años ha estado inmerso en adoptar medidas auto eficaces apostando además, gracias al Decreto de renovación y modernización hotelera, por reconvertirse y renovarse, proceso por el que no sólo se han reconvertido muchos establecimientos a lo largo de la costa y el interior, sino que, muchos otros ya están en proceso de mejorar y apostar por reposicionarse con el fin de aportar valor añadido y diferenciación a su oferta para ser más competitivos, por ello, nuestro reto y posición futura, es la especialización y la apuesta por la calidad como ejes fundamentales prevaleciendo éstos, sobre el volumen o la cantidad por la que otros destinos apuestan. Por todo ello, deseamos que los destinos y las administraciones, se esfuercen en mejorar la competitividad para ser más atractivos mejorando así el impacto económico de la actividad turística y prevaleciendo sobre el volumen” ha añadido José Luque.