Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 12 segundos
Este proyecto está desarrollado por la Universidad de Málaga (UMA) y subvencionado con 2M€ por Inclusión Social
La consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López, y el rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez, han presentado este jueves en la sala de juntas del Rectorado el Plan ‘Más cerca’, el cual persigue llevar la innovación a la atención domiciliaria de las personas dependientes.
López ha valorado la importancia de este plan, el cual cuenta con dos millones de euros subvencionados por la Junta de Andalucía para el desarrollo e investigación de soluciones tecnológicas que retrasen la institucionalización de este colectivo y así puedan permanecer el mayor tiempo posible en sus domicilios y entornos habituales. De hecho, el pasado mes de diciembre el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía aprobó adelantar el cien por cien de la subvención a la Universidad de Málaga (UMA) de cara a facilitar la puesta en marcha del mismo.
La titular de Inclusión Social ha hecho hincapié en la importancia de «unir la tecnología al ámbito social con el objetivo de hacer más felices a las personas mayores y a las personas dependientes», los cuales prefieren permanecer el mayor tiempo posible en sus hogares, en su entorno y de ahí la necesidad de avanzar en soluciones tecnológicas que lo permitan. Tras remarcar el talento y capacidad investigadora de la Universidad de Málaga, la consejera ha ensalzado «la estrecha colaboración entre el Gobierno de Andalucía y las universidades, en este caso la de Málaga» para la puesta en marcha de un proyecto innovador que sentará las bases de un nuevo modelo de atención domiciliaria en Andalucía.
En esta misma línea se ha manifestado el rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez, el cual ha destacado que este proyecto es «una oportunidad de poner nuestras capacidades tecnológicas y de formación en las ciencias sociales al servicio de la sociedad, ya que la universidad no solo es una institución que forma profesionales, sino que también moldea ciudadanos y además sirve para el desarrollo social». «Por tanto, este proyecto es un ejemplo de lo que nosotros queremos ser como universidad pública: una universidad capaz de aportar soluciones a los problemas de las personas que conforman la sociedad que nos rodea a través de la investigación y la transferencia de resultados», ha continuado.
El ‘Proyecto de Innovación Tecnológica y Social de Cuidados Domiciliarios, con cargo a fondos europeos y una cuantía total de 2.294.000 euros, se desarrolla mediante un convenio interadministrativo de dos años de duración entre la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad y la Universidad de Málaga. Por ello, para poder permitir la puesta en marcha del mismo y dado que sería una carga compleja para las arcas de la institución universitaria, resulta imprescindible el pago de la subvención de manera adelantada. En concreto, la Consejería asume dos millones y el resto, la UMA.
En el marco de este proyecto, se va a compatibilizar el espacio académico, tanto en los ámbitos de la ingeniería como en el social, con la intervención y experimentación en domicilios reales con personas reales. En concreto, se va a crear un ‘social living lab’, un centro de demostración que servirá de laboratorio de pruebas para poner en práctica las soluciones tecnológicas que se vayan creando. Como ha enfatizado la titular de Inclusión Social, «se trata de ser efectivos, de probar en casas» las propuestas para verificar que su implantación va a ser fructífera y útil.
El mencionado proyecto tiene por objeto innovar en materia de la atención domiciliaria para conseguir ir más allá de la ayuda a domicilio, centrándose en la investigación y el desarrollo de soluciones tecnológicas y su adaptación en el hogar, de manera que se retrase la institucionalización de las personas dependientes y estas puedan permanecer en su domicilio el mayor tiempo posible. La inmensa mayoría de estas personas, en torno al 95 por ciento, manifiesta el deseo de seguir viviendo en su entorno habitual de vida con los apoyos y cuidados que sean necesarios.
«Tenemos ante nosotros el reto de aplicar a la prestación de los servicios sociales los beneficios de las nuevas tecnologías porque ello va en beneficio de los andaluces y andaluzas y de las personas más vulnerables», ha continuado López, que ha sostenido que «cada paso que se da» de cara a mejorar las atenciones y servicios suponen «la sonrisa de una persona mayor y eso no tiene precio», ha zanjado.
Completar lo social con lo tecnológico
Entre los muchos objetivos de este plan, destacan la necesidad de replantear el actual modelo de atención y cuidados domiciliarios e incorporar la dimensión tecnológica en el hogar. Complementar lo social con lo tecnológico para validar un modelo de atención a las personas innovador que favorezca su permanencia en el hogar. De este modo, las prestaciones asistenciales se complementan con tecnologías en hogar (domótica, sistema de seguridad, apoyos para la movilidad), entre otras medidas flexibles y adaptadas.
Además, tiene una doble dimensión, por un lado, con una intervención en entornos reales con personas reales y por otro, con espacios controlados en el entorno académico.
Este proyecto despertó un gran interés en el evento Tecnosocial, celebrado en Málaga a principios del año 2022, debido al gran impacto que puede tener el resultado de sus investigaciones en el modelo de atención que prestan los servicios públicos a la ciudadanía en situación de dependencia. Además, este proyecto, con un marcado carácter innovador, sentará las bases para el desarrollo y adecuación normativa posterior de un nuevo modelo de atención domiciliaria en Andalucía.