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El secretario general del PSOE de Málaga, Daniel Pérez, ha participado en los premios Concha Gómez Moya que se ha entregado a título póstumo a María Teresa Jiménez, así como a sus hijas quienes han luchado activamente por la memoria democracia, la justicia y la reparación de las víctimas
Prensa PSOE Málaga.- El secretario general del PSOE de Málaga, Daniel Pérez, ha destacado hoy en Coín que el III Premio Concha Gómez Moya en María Teresa Jiménez Gómez y a sus dos hijas «pone en valor su lucha y que no cayera en el olvido, la represión franquista fue más dura contra las mujeres», ha dicho.
Acompañado por el secretario general del PSOE local, Salvador Rojas, y por la secretaria de Igualdad del PSOE malagueño, Fuensanta Lima, Pérez ha destacado que «es un acto de justicia y de reparación para luchar contra el olvido», ha expresado.
«La lucha de ellas permitió que se pusiera un monolito para que quedara claro la represión del franquismo, por eso hoy reconocemos la justicia y la reparación que da la Ley de Memoria Histórica, es algo que hace el PSOE, que hace el gobierno de Pedro Sánchez con las leyes y también con actos tan importantes como el que hacemos hoy en Coín», ha concluido.
Por su parte, Salvador Rojas ha destacado que, en esta edición, «nos hemos centrado en la Memoria Histórica, es el momento ideal para hacerlo cuando hay fuerzas políticas que quieren acabar con ella». «Cuando hay todavía testimonios vivos de la represión franquista durante 40 años, es el momento de que los vecinos y vecinas de Coín pongan cara a la memoria democrática», ha expresado.
«Por ello nuestro reconocimiento a María Teresa Jiménez Gómez y a sus dos hijas, Carmen y Rafaela que, durante 40 años, mantuvieron con sus manos la fosa común del cementerio de Coín hasta que se construyó el monumento. A ellas y a sus familias nuestro reconocimiento por el apoyo a este acto», ha concluido.
Por último, Fuensanta Lima ha destacado que el III Premio Concha Gómez Moya «sirva para reconocer la dignidad de unas personas que perseveraron en el recuerdo y dignifican ese trabajo. Lucharon en un tiempo en el que tenían miedo pero lo perdieron para esa dignificación; también es un acto de igualdad», ha recordado.
«Nos corresponde a todos y todas hablar de concordia pero también cuando haya reconocimiento a lo que fuimos, reconocemos la labor de mujeres que, sin saberlo, crearon el precedente ante los vecinos y vecinas de Coín. Hay que conocer esa realidad para saber que los derechos se conquistan pero que fácilmente se pierden», ha concluido.