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Se han creado más de 4.300 en once talleres celebrados en Yunquera, Alozaina y Tolox
Cristóbal Ortega ha destacado esta iniciativa pionera de colaboración institucional y de participación ciudadana que permitirá repoblar con diferentes tipos de semillas y de técnicas en zonas acotadas para así poder realizar un seguimiento de los resultados
La Diputación de Málaga colabora con la Junta de Andalucía y CIFAL Málaga para la repoblación de los pinsapos de Sierra Bermeja y Sierra de las Nieves. Lo hace con la creación de más de 4.300 bombas de semillas, también conocidas con la expresión japonesa «nendo dango» (bola de arcilla), en once talleres celebrados en el Vivero de Yunquera y en los CEIP Arquitecto Sánchez Sepúlveda de Alozaina y San Roque de Tolox.
Así lo ha dado a conocer el vicepresidente y diputado de Medio Ambiente, Turismo Interior y Cambio Climático, Cristóbal Ortega, que ha explicado que se trata de una iniciativa pionera de colaboración institucional y de participación ciudadana, ya que en la elaboración de las bombas de semillas han colaborado los escolares de la zona.
De las 4.300 bombas de semillas, 3.000 han sido fabricadas con semillas recogidas en Sierra Bermeja y 1.300 con semillas procedentes de la Sierra de las Nieves.
De las 3.000 unidades de Sierra Bermeja, mil serán lanzadas este domingo en la zona por los ‘Cascos Verdes’ de CIFAL Málaga, y las 2.000 restantes serán utilizadas por la empresa pública TRAGSA para la restauración de la zona incendiada en 2021. Además, esta acción se complementará con la plantación de 7.000 pinsapos y semillas directamente en el suelo.
Por su parte, de las 1.300 bombas de semillas de la Sierra de las Nieves, 500 fueron lanzadas el pasado 5 de diciembre por escolares en la zona del Parque Nacional dentro de Sierra Blanquilla, y las 800 restantes las utilizará el Equipo de Recuperación del Pinsapo de la Junta de Andalucía en diferentes rodales del Parque Nacional Sierra de las Nieves.
«Así, al actuar en zonas acotadas, se podrá realizar un seguimiento exhaustivo del comportamiento de cada una de las técnicas utilizadas», ha concluido Cristóbal Ortega.