Decreto de regulación de bomberos en Andalucía para 2024

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El consejero ha subrayado, en el Consejo Andaluz del Fuego, que para ser bombero se necesitará el título de técnico en emergencias

El decreto mejorará el servicio a la ciudadanía, así como la cualificación y condiciones del personal de los servicios de extinción

El Consejo Andaluz del Fuego ha dado hoy el visto bueno a la primera propuesta de decreto de regulación de acceso, promoción interna y formación de los bomberos andaluces. Así lo ha trasladado el consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz, que ha presidido este órgano colegiado de participación social y ha anunciado que el decreto estará listo tras su tramitación administrativa en este mismo año.

“Nos habíamos comprometido a hacerlo y lo hemos hecho. Este decreto, 22 años después de la aprobación de la Ley de Emergencias de Andalucía, acabará con la disparidad y homogeneizará e igualará los procesos en todo el territorio andaluz”, ha anunciado Antonio Sanz, que también ha recordado que en marzo de 2023 ya se saldó una deuda histórica con los bomberos de la región gracias a la modificación de la Ley de Emergencias, “una aprobación de consenso, sin ningún voto en contra”. “Ya entonces dijimos que esa modificación no era el final sino el principio de todo lo que estaba por venir y la prueba es este borrador de un decreto pionero porque no existe en España una regulación como esta”, ha subrayado el consejero.

Con el nuevo decreto, todos aquellos hombres y mujeres que aspiren a ser bomberos u opten a categorías superiores en nuestra comunidad autónoma tendrán claro los requisitos de acceso, titulación requerida para cada uno de los distintos grupos, temarios, tipos de examen, requisitos físicos, formación, etc. y, por tanto, se sientan las bases para concurrir en igualdad de condiciones a estos procesos selectivos.

“Se pone, en definitiva, luz y taquígrafos a los procesos, un derecho esencial en el ámbito de acceso a la función pública y se da respuesta a una larga reivindicación de los profesionales”, ha apuntado Antonio Sanz, que ha insistido también en que “es un decreto hecho entre todos y para todos, con el objetivo común de avanzar en la prestación de un mejor servicio a la ciudadanía y de favorecer la cualificación y condiciones del personal de bomberos”.

 

El borrador de decreto que hoy se ha presentado se ha llevado a cabo con el diálogo y participación de los interesados: la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, sindicatos –CSIF, UGT y CCOO– y el personal de la Consejería de la Presidencia, y será la primera regulación de este tipo en el derecho de la comunidad autónoma.

Homogeneización de criterios 

El texto consta de siete capítulos. El primero relativo a los principios generales de acceso y procedimientos de selección, el segundo referido al turno libre mediante el procedimiento de oposición o concurso oposición para la categoría de bombero o bombera y por el de concurso o concurso oposición para el resto de las categorías. El capítulo tres aborda la promoción interna; mientras que el cuatro hace lo propio con las formas de movilidad, permuta y comisiones de servicio. El cinco y seis se refieren respectivamente a la colaboración interadministrativa y la regulación de la segunda actividad y, por último, el séptimo regula la formación de los bomberos.

 

El consejero de la Presidencia ha puesto en valor que el decreto apuesta por la profesionalización y el trazado de un itinerario formativo para los futuros bomberos: “Una persona que quería ser bombero antes no sabía qué es lo que tenía que estudiar. Ahora tiene perfectamente claro lo que debe hacer. Así, todo aquel que quiera ser bombero en Andalucía deberá estar, en adelante, en posesión del título de Técnico en Emergencias y Protección Civil. Conectamos de este modo, los centros de formación con el ámbito profesional”.

Gracias al decreto, los opositores tendrán acceso no solo al temario, sino también a la valoración objetiva de las pruebas psicotécnicas y los requisitos de aptitud física que deben superar: flexiones, carreras de velocidad, resistencia, natación, etc., así como el cuadro de exclusiones médicas que regirán para cada una de las categorías y que serán iguales para todos los procesos en Andalucía.

La formación especializada ha sido otro de los elementos de esta primera propuesta que ha destacado el consejero Antonio Sanz. Como ya sucede con las promociones de las policías locales en Andalucía, o en el ámbito estatal con la Policía Nacional, la Guardia Civil o el Ejército con el paso de todos los aspirantes por las Academias, todo aquel que vaya a ejercer de bombero en Andalucía tendrá que haber superado un curso de formación, a través del Instituto de Emergencias y Seguridad Pública de Andalucía (IESPA), escuelas locales de bomberos o centros privados, previamente homologados por el IESPA.

Para adquirir la condición de funcionario no bastará solo con aprobar la oposición o concurso oposición sino también habrá que aprobar el curso de capacitación. La nota final será el resultado de la obtenida en la oposición o concurso oposición y en el curso de formación. “Tendremos bomberos más cualificados desde el primer momento de su incorporación a los servicios, tal y como han venido demandando los propios profesionales del sector”, ha puntualizado el consejero de la Presidencia.

Colaboración interadministrativa

Sanz ha desgranado otros elementos destacados del decreto como la colaboración interadministrativa. Así, la Junta de Andalucía se compromete a asumir la organización y los costes derivados de la formación del personal, así como de los procesos selectivos que les sean encomendados, gracias a la posibilidad de establecer acuerdos de colaboración con las propias entidades locales.

Además, la normalización de la segunda actividad garantiza que todos los profesionales que estén en primera línea de intervención lo hagan en plenas capacidades para ello, al tiempo que se aprovecha el bagaje y experiencia de los profesionales al final de su vida laboral. La regulación de la movilidad, otro de las grandes demandas del sector para favorecer la reagrupación y la conciliación familiar, ha sido otro de los elementos vehiculares de este decreto y para el que se reservarán plazas en todas las ofertas de vacantes anuales.