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Revista Lugar de Encuentro continúa su cobertura en el Festival de Málaga. Nuestro compañero Juan José Acedo ha entrevistado a Íñigo Aranburu y Aina Picarolo, actor y actriz de «Nina».
ÍÑIGO ARANBURU (ACTOR)
¿Cuál es tu papel en la película y cómo te lo preparaste?
Mi personaje es Blas, que es el amigo de la infancia de Nina y yo hago de Blas adulto. Soy el único apoyo, la única persona de confianza que tiene Nina al volver al pueblo 30 años después. En ese sentido, nos entendemos bastante bien, porque ninguno de los dos se termina de adaptar al pueblo y entonces, de repente volvemos a encontrarnos, recordamos toda nuestra infancia y adolescencia. Conectamos desde ese punto, de que ella necesita a alguien y yo necesito también a alguien. Cuando estábamos rodando, decíamos que era una historia de amor, no necesariamente romántica, pero sí que surge como un amor muy fuerte entre los dos.
En cuanto a la preparación del personaje, fue muy sentido para mí porque en los ensayos con Patricia surgió una relación muy bestia que se basaba sobre todo en la vergüenza, en mi vergüenza, por toda la relación que habíamos tenido durante 30 años, hasta un punto en que en mi cabeza hay un “clic” y ya lo único que hago es seguirla y apoyarla en lo que sea.
¿Conocías Málaga y su Festival?
No conocía ni el Festival ni Málaga, la verdad. Estoy encantado. Lo único que se supone que aquí hace calor y ayer pasé un frío increíble, je, je. Pero muy bien. El problema es que solo voy a estar aquí apenas dos días con el tema de la promoción, así que no me ha dado tiempo a ver nada. Me lo dejo apuntado para visitar con más tiempo en otra ocasión.
¿Por qué hay que ir a ver “Nina”?
A mí lo que más me interesa de la película es que se trata de un western femenino contemporáneo, es una mezcla muy potente. La protagonista es una mujer y el personaje que le sigue en vez de ser una mujer, de repente es un hombre. Blas enseña como una nueva masculinidad, que muchas veces en el cine no se enseña. Es un tío sensible, seguidor, y eso me interesa mucho. Y luego, todo el paralelismo que tiene con el western. De repente, en vez de haber un saloon está el centro cívico del pueblo, el hotel se mantiene… Eso me parece muy interesante.
¿Qué papel te gustaría interpretar que todavía no hayas hecho?
¡Comedia! He hecho mucha comedia en teatro y me lo paso muy bien, me resulta muy divertida la comedia. Echo un poco de menos poder reírme también delante de una cámara. He hecho comedia en televisión, pero en cine nunca me lo han ofrecido.
¿Qué próximos proyectos tienes en mente?
Pues que se pueda contar concreto, no se puede contar apenas nada. Tengo ahora personajes pequeños, pero en cuatro producciones a la vez, con lo bueno y lo malo que tiene eso. Estoy en dos rodajes a la vez en la misma semana. Estoy contento porque estoy los próximos 4 meses dando vueltas por Euskadi, feliz de la vida.
AINA PICAROLO (ACTRIZ)
¿Cómo ha sido interpretar a Nina de joven y cómo lo preparaste?
Interpretar a Nina de joven ha sido una responsabilidad y también ha sido bastante fácil porque he podido conectar. Nina en la película tiene 15 años, para cumplir 16, y yo tengo 20, así que no hace tanto que tenía esa edad, así que no me ha resultado muy difícil conectar con esas necesidades que tiene una niña de 15-16, con esas aspiraciones, ambición, ilusión…
¿Qué ha significado para ti debutar en el cine como protagonista con este papel?
Me siento agradecida, la verdad, ha sido magnífico. Los meses que estuvimos rodando en Mundaka ha sido un sueño, era como soñar despierta todo el rato.
¿Conocías Málaga y su Festival?
Pues, en mi caso, yo tengo sangre malagueña. Mis abuelos son de Cañete la Real. He estado tres veces en Málaga, pero nunca para el Festival, sino de visita a mi familia. No conozco la ciudad tanto como me gustaría, pero sí un poquito.
¿Cómo ha sido trabajar con dos actores de la talla de Patricia y Darío?
Muy fácil. Son personas maravillosas antes de ser actores maravillosos. Ha sido un honor. Somos amigos además de ser compañeros y ha sido muy ameno. La película es necesaria y remueve mucho, así que creo que es una buena oportunidad para hacernos reflexionar a todos.
¿Qué próximos proyectos tienes en mente?
Yo estoy ahora con Elvira Mínguez que, además de ser actriz, es directora, guionista y escritora y está rodando una nueva serie que se llama “La sombra de la tierra”. La estamos rodando en Madrid. Es una historia ambientada en 1896 y las protagonistas son María Morales y Adelfa Soto. Ellas son magníficas. Están enfrentadas la una con la otra. ES una historia de odio entre familias, entre tierras…
