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Antonio Berlanga Pino, poeta y escritor, es una figura destacada en la escena literaria de Álora, su localidad natal en la provincia de Málaga. Nacido el 23 de marzo de 1968 en la pintoresca Calle Cantarranas, Berlanga ha residido siempre en esta localidad andaluza. La calle que lo vio nacer, jalonada por naranjos y limoneros, refleja en parte el espíritu lírico y sencillo de su poesía, profundamente enraizada en su entorno.
Proveniente de una familia humilde —su padre, vendedor ambulante de frutas y hortalizas, y su madre, ama de casa— Berlanga no posee títulos universitarios, lo que le lleva a definirse como un “poeta natural”. Afirma haber sido tocado por un don innato para la poesía y la escritura desde muy joven, y es precisamente esta autenticidad la que marca el carácter de su obra, una producción que abarca desde la poesía hasta la narrativa y el teatro con toques líricos.
Inicios en la escritura
Desde los 11 años, Berlanga comenzó a escribir poemas. Eran los años de la escuela, y las clases se daban en unos barracones, pues la escasez de medios educativos en las décadas de los setenta y ochenta eran grandes. Se influenció con autores como Rubén Darío y Salvador Rueda. Su primer gran hito en el mundo editorial llegó en 2007, cuando publicó su primer libro, Belleza crepuscular, un conjunto de romances y sonetos que rápidamente se popularizó en Álora y su comarca. Esta obra marcó el inicio de una prolífica carrera literaria, que siguió con títulos como La serpertina andaluza, dedicada a su pueblo natal, y Atalaya de romances andaluces.
Pero ya antes, José María Lopera, director de la Revista Álora la Bien Cercada, y patrocinada por el Ayuntamiento de Álora, excelente poeta al que consideró su maestro más próximo, le dio a conocer publicando dos sonetos en la prestigiosa revista, una de las de más envergadura en el plano nacional e internacional.
Bernhard Frank, un revulsivo en su vida
Un punto de inflexión en su vida personal y literaria ocurrió en 2007, cuando conoció a Bernhard Frank, un bibliófilo alemán afincado en Málaga y luego en Álora. La pareja ha sido una fuente de mutua inspiración, y la vasta cultura de Frank en historia, música y literatura ha tenido un profundo impacto en el trabajo de Berlanga. En 2009 publicó tres libros a la vez. Se trataba de teatro poético, con algún tono de ironía. Uno de ellos se basaba en una historia real. Se titulan “La imagen de la rosa” y “Madre Amantísima” y el tercero era un poemario con prólogo del profesor y ensayista perote Tomás Salas, titulado “Amante paloma”.
En 2013, influido por su pareja, Berlanga inició una nueva etapa en su escritura con la obra Una mirada al desván, dejando temporalmente el verso para adentrarse en la narrativa breve.
Autor de poesía y prosa
A lo largo de los años, Berlanga ha continuado publicando tanto poesía como prosa. Entre sus obras más destacadas figuran Versión humana (2014), una colección de poemas breves cercanos al aforismo, Romancero andaluz (2015), con claras influencias de García Lorca y Machado, y Sonanta de siervo (2016), en el que combina las gacelas y casidas con un estilo propio. Su obra más extensa en prosa poética, Edicto deseo (2019), subraya su capacidad narrativa, y en el mismo año regresó a su Álora natal con Álora, mi ciudad natal, una obra en prosa y verso impresa por Imprenta Castillo del municipio.
En 2024, Berlanga ha vuelto a la poesía con dos libros: una colección de sonetos en tres secciones publicada por Hebras de Tinta, y Álora en lírico, donde aborda temas más genéricos pero profundamente vinculados con los personajes más reveladores de su localidad.
Además de su trabajo literario, Berlanga ha participado en numerosas presentaciones en centros culturales de Málaga, como el Ateneo y el Centro Andaluz de las Letras, y ha dado recitales en prestigiosos espacios como el Teatro del Centro Cultural María Victoria Atencia y el Liceo de Málaga. En 2014 presentó la novela La hija del jardín en el Centro Andaluz de las Letras, finalista del premio Fernando Lara. Recitó también en Pizarra, Alhaurín El Grande, Campillos y Fuengirola.
Reconocimientos en su carrera
A lo largo de su carrera, ha recibido varios reconocimientos, entre ellos el premio de poesía A.M.E (El Pimpi, Málaga 2012), el premio «Poemas a Torrijos» y el «Victoria Kent». Además, fue finalista en el Certamen de Poesía “Poeta de Cabra” en Madrid en 2018. De todas sus experiencias, destaca con emoción su participación en el espectáculo Rondando a Lorca, celebrado en el Teatro Cervantes de Álora, donde interpretó a Federico García Lorca.
Con humildad y gratitud, Berlanga agradece el apoyo constante de sus paisanos y residentes extranjeros en Álora, quienes han sido una fuente constante de inspiración para su trabajo. «Mantengo viva esta llama poética gracias al respaldo de mi pueblo», asegura, confirmando que la conexión con su tierra y sus raíces es, y seguirá siendo, el motor que impulsa su obra.
