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- El sindicato, que condena las inaceptables declaraciones difundidas por Bautista, ha reclamado formalmente el cese inmediato de sus funciones, así como que ofrezca disculpas por sus acusaciones
(Nota de prensa CSIF) La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, primera fuerza sindical multiprofesional en el Servicio Andaluz de Salud (SAS), ha reclamado formalmente este lunes la dimisión inmediata del delegado territorial de Salud y Consumo en Málaga, Carlos Bautista, tras las declaraciones difundidas sobre el cierre de las urgencias del Hospital Civil. A juicio de CSIF, se trata de una falta de respeto inaceptable, tanto para la ciudadanía como para los profesionales, y reclama una clara rectificación, así como que cese de sus funciones de forma inmediata.
En un escrito dirigido a la Delegación territorial de Salud y Consumo y a la Delegación de Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga, la central sindical ha expresado su más rotunda condena ante las declaraciones difundidas por Bautista en un video publicado en redes sociales, en el que no solo falta a la verdad, sino que acusa de forma injusta y grave a los trabajadores y a los sindicatos de complicidad en el cierre de las urgencias hospitalarias del Hospital Civil, en 2020.
CSIF denuncia que es inaceptable que un representante público, que debe velar por el bienestar de la ciudadanía y respetar la labor de los profesionales que garantizan la calidad de los servicios públicos esenciales, utilice la desinformación como herramienta para desviar responsabilidades o justificar decisiones que afectan gravemente a la sanidad pública. Las irresponsables declaraciones del delegado de Salud no solo dañan la imagen de los trabajadores del Servicio Andaluz de Salud y sus representantes sindicales, sino que mienten impunemente a los malagueños sobre los motivos detrás del cierre de unas urgencias hospitalarias.
La central sindical recuerda que la unidad de Urgencias del Hospital Civil, que el SAS suprimió a causa de la pandemia en 2020 supuestamente de forma temporal para “mejorar” la respuesta ante el coronavirus, atendía una media de 350 casos diarios, que fueron absorbidos por el Hospital Regional de Málaga, con los consiguientes problemas de colapso y sobrecarga, hacinamiento y merma de la calidad asistencial.
Ya en 2021 CSIF manifestó su rechazo y advirtió de las consecuencias de este cierre unilateral por parte de la Administración, denunciando la falta de transparencia y la nula planificación sorbe su reapertura. Además, la central sindical puso entonces en marcha una recogida de firmas entre los profesionales y denunció las graves consecuencias de la unificación en el Hospital Regional, cuya saturación y colapso se cronificó tras retroceder 40 años en calidad asistencial en Málaga y la deshumanización de la atención.
CSIF recuerda que estas urgencias hospitalarias desempeñaron una labor histórica en la formación de miles de profesionales sanitarios en nuestra provincia (albergaban la Escuela de Enfermería), y eran esenciales en el mapa asistencial del SAS en Málaga, y su cierre no puede atribuirse a la labor de quienes, con dedicación y esfuerzo, han garantizado su funcionamiento. Tanto los profesionales sanitarios como la central sindical ha alertado en numerosas ocasiones sobre la falta de recursos, personal y planificación adecuada, factores que verdaderamente están detrás de este cierre.
En lugar de escuchar a sus profesionales, que han clamado por la reapertura en infinidad de ocasiones, y buscar soluciones conjuntas, el delegado territorial de Salud ha optado por culpar de manera infundada a quienes defienden los derechos laborales y la calidad del servicio público esencial que es la Sanidad.
Por todo ello, CSIF exige la dimisión inmediata de Carlos Bautista y solicita que, además, ofrezca disculpas públicas tanto a los malagueños y malagueñas como a los profesionales de la sanidad pública. La ciudadanía merece la verdad, y los trabajadores del sector público, especialmente los del ámbito sanitario, no deben ser utilizados como chivos expiatorios ni señalados como cómplices del desmantelamiento de los servicios públicos esenciales, cuando en realidad son las víctimas directas de la falta de apoyo y recursos.
La central sindical subraya que la responsabilidad política debe ejercerse con integridad, respeto y compromiso con la verdad. La difusión de mensajes engañosos y calumniosos, con el único fin de desviar la atención de los verdaderos problemas estructurales, no puede ser tolerada en una sociedad democrática.
Desde CSIF Málaga, reiteramos nuestro compromiso con la defensa de los derechos de los trabajadores y de un sistema sanitario público de calidad, e instamos a que se depuren las responsabilidades oportunas ante esta grave falta de ética política.