Cártama contra la procesionaria

Captura procesionaria Cártama

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El Ayuntamiento intensifica los trabajos para combatir la procesionaria

El Ayuntamiento de Cártama, a través del área de Medioambiente, está intensificando los trabajos para combatir la procesionaria. Según explicó la concejala del área, Toñi Sánchez, una de las actuaciones que se está realizando es la instalación de unos anillos de captura alrededor de los árboles de forma que las orugas, cuando bajen por el tronco, caigan a una bolsa colectora y no lleguen al suelo. Este sistema detiene el desarrollo de las orugas y permite su retirada sin dificultad.

Estos anillos se están colocando en áreas donde hay viviendas cercanas o en zonas concurridas, concretamente en los ejemplares en los que se detecta que hay bolsones de procesionaria. Asimismo, cuando el técnico aplicador llega a la zona y ve que hay larvas que están en la superficie, se realiza una pulverización de choque para después retirarlas.

Sánchez recordó que anteriormente se han llevado a cabo distintos trabajos de tratamiento preventivo como la endoterapia. “Sin embargo, a finales de invierno y principios de la primavera es cuando estas orugas están en su periodo más activo, por lo que es necesario reforzar las actuaciones para evitar que estos insectos dañen los árboles y provoquen molestias tanto a los vecinos como a sus mascotas”, señaló.

La procesionaria es la peor plaga que afecta a los pinos. Se trata de un insecto defoliador (se alimenta de las hojas de las coníferas y provoca su caída) que puede hacer que los árboles se debiliten e incluso pueden secarlos. Además, las orugas tienen unas vellosidades que causan urticarias y alergias en personas y animales.

En verano, las mariposas de procesionarias del pino se aparean y la hembra pone los huevos en las hojas de los pinos. Entre mediados de septiembre y mediados de octubre nacen las orugas ay empiezan a alimentarse de las acículas de los árboles, produciendo su defoliación. Además, construyen los nidos o bolsones en los que se van a refugiar del frío.

A finales del invierno o principios de la primavera, las orugas descienden en fila hasta el suelo, donde se entierran. Tras pasar una fase de pupa, de los capullos saldrán las mariposas que volverán a poner los huevos en las acículas.

Desde la concejalía se solicita a la ciudadanía que, ante cualquier incidencia, se ponga en conocimiento del Ayuntamiento en el teléfono 952 42 21 95 / 26 o a través de la APP Línea Verde.