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La procesión de la patrona por las calles de la barriada el sábado y la paella popular del domingo, principales momentos de unos festejos que cumplían su 65 aniversario.
(Prensa Ayto Alh Torre) La barriada de Santa Amalia celebró durante el fin de semana sus fiestas patronales, que volvieron a congregar a numerosos vecinos y vecinas en una edición muy especial, porque se celebraba su 65 aniversario. La Asociación de Vecinos de Santa, con la colaboración del Área de Fiestas del Ayuntamiento, se encargaron de la organización de unos festejos que arrancaron el viernes, con el repique de campanas y con la elección de las reinas y míster en sus diferentes modalidades, que se complementa con diferentes actividades lúdicas en las que los más pequeños tiene una especial relevancia.
El punto álgido, se alcanzó en la noche del sábado cuando, tras la celebración de la tradicional misa a cargo del párroco de Alhaurín de la Torre, tuvo lugar la procesión de Santa Amalua a hombros de los vecinos que, acompañados de la Banda Municipal de Música, lucieron el pequeño y bonito trono por sus calles. El alcalde del municipio, Joaquín Villanova, además de una amplia representación de autoridades municipales, estuvieron presentes en un acto que conttó además con la participación de residentes de otras zonas de Alhaurín de la Torre.
La procesión transcurrió con normalidad, entre cánticos de las mujeres y palabras bonitas al trono y la virgen. A su término se le dedicó la salve »A Santa Amalia yo quiero volver», interpretada por la orquesta invitada, hubo fuegos artificiales y se llevó a cabo el encierro, dando paso a la verbena. El presidente de la asociación de vecinos, Pedro Contreras, subió al escenario de la plaza para llamar al alcalde y a los miembros de la corporación y hacerles entrega de un recuerdo consistente en un cuadro del cartel de este año. Villanova agradeció el gesto y habló de la riqueza de Santa Amalia en medio de un sano ambiente.
La diversión se repitió en la jornada del domingo, en la que hubo exhibiciones deportivas y una paella popular en la que se dieron cita nuevamente un buen número de personas. Además del arroz, muchas familias llevaron su popia comida preparada de sus casas para compartir. La asociación argentina Martín Fierro actuó para los presentes con canciones y bailes típicos de su tierra.