La Junta facilita atención a 40 menores en la Escuela de Verano de Cártama

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 16 segundos

Escuela Verano Cartama 1

La delegada de Igualdad reseña el refuerzo de esta iniciativa, dirigida a familias con dificultades o riesgo de exclusión, que extiende al periodo vacacional las actividades de garantía alimentaria, integración y formación lúdica.

(Prensa Junta de Andalucía) La delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Ana Isabel González, que ha visitado hoy, junto a la concejala de Bienestar Social del Ayuntamiento de Cártama, Isabel Sánchez, la escuela de verano en el CEIP Nuestra señora de los Remedios, gestionada por Animación Malacitana y que atiende a 40 menores, ha destacado el esfuerzo y compromiso del Gobierno andaluz con esta iniciativa, cuyo presupuesto asciende en Cártama a 19.927 euros. En el conjunto de la provincia alcanza un total de 370.000 euros, lo que conlleva un incremento de 20.000 respecto a 2016.

González ha recalcado el especial interés de esta medida, dirigida a menores que, preferentemente, residen en zonas con necesidades de transformación social, cuyas familias tienen dificultades o se encuentran en situaciones de riesgo o de exclusión social. En este sentido, la delegada ha reseñado que esta iniciativa de la Junta es muy necesaria para dar atención a los menores con dificultades sociales y falta de recursos en su ámbito familiar, permitiéndoles disfrutar de un verano más normalizado en cuanto a su alimentación básica y aprovechamiento del tiempo libre que aquí dedican al entretenimiento estimulante y formativo.

Las escuelas de verano, enmarcadas en la Red de Solidaridad y Garantía Alimentaria, incluyen el servicio de comedor que garantiza las necesidades alimentarias básicas de los menores mediante la distribución de 3 comidas diarias, e incorpora también actividades complementarias de carácter socioeducativo, relacionadas con el apoyo de los contenidos currículares, de ocio y tiempo libre y de educación en valores, entre otras. Están gestionadas a través de organizaciones y entidades sin ánimo de lucro, con las subvenciones que establece la Consejería de Igualdad.

La Junta de Andalucía ha reforzado las escuelas de verano en Málaga, que eleva a 14 el número de las que vienen funcionando en la provincia durante los meses de julio y agosto, de las cuales se benefician un total de 990 niñas y niños.

Estas 14 escuelas de verano se desarrollan en las barriadas de Los Asperones, Palma-Palmilla, zona Centro de Málaga, Trinidad- Perchel, La Corta-Monte Pavero y Las Castañetas en Málaga capital; La Gloria y Cuesta del Visillo en Vélez Málaga; Las Albarizas en Marbella, La Campiña-Los Remedios en Cártama, la Dehesa-El Fuerte del municipio de Ronda, y la barriada Valdealeanes, en Antequera, que se incorpora este año.

La delegada ha expuesto que estas escuelas de verano se suman a otras actuaciones de la Red de Solidaridad y Garantía Alimentaria que contemplan diferentes líneas de ayudas, una de ellas está destinada a la preparación y reparto de alimentos a personas con escasos recursos económicos o en riesgo de exclusión, dotada con 653.447 euros en Málaga, «son -ha explicado- los comedores sociales que atienden en la provincia a 2.445 personas al día en la provincia».

Además, se destinan otros 138.749 euros para el suministro de comidas elaboradas a domicilio para personas mayores de 65 años con escasos recursos económicos y que no pueden acceder al servicio de comedor. De este programa se benefician diariamente 128 mayores en la provincia.

González también ha puesto de relieve la necesaria coordinación con las entidades sin ánimo de lucro, que tienen una gran experiencia en el trabajo de campo en zonas con necesidades de transformación social .

Las escuelas de verano se pusieron en marcha en 2013 en desarrollo del Decreto 7/2013 , de 30 de abril, de medidas extraordinarias y urgentes para la lucha contra la exclusión social en Andalucía, dentro del Plan Extraordinario de Solidaridad y Garantía Alimentaria, cuyo objetivo es garantizar las necesidades alimentarias básicas de personas y familias en situación de exclusión social o riesgo de estarlo. Se desarrollan a través de entidades privadas sin ánimo de lucro que se encargan de la preparación y reparto de alimentos a menores de edad, preferentemente en zonas con necesidades de transformación social, durante el periodo de vacaciones de