Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 59 segundos
(Carlos Abásolo/Estudiante de Periodismo en la UMA) Ayer, hablando con una persona muy importante para mí, comenzamos a conversar sobre muchos de los problemas de origen político y económico que lastran la sociedad actual (conversar conmigo sobre ese tema no se lo deseo ni a mi peor enemigo). No voy a contar la historia contemporánea de los últimos 10 años en el mundo occidental, pero:
El gobierno estadounidense de George W. Bush tuvo la lúcida idea de crear las hipotecas «subprime». Es decir, cualquier ciudadano podría acceder a un préstamo hipotecario con poco más que el documento de identidad (corríjanme los economistas). La ciudadanía se ve auspiciada por un genial gobierno y un responsable mercado económico a comprar propiedades sin garantías de poder pagarla. Como era de esperar, semejante necedad pasa como un tsunami por EEUU, y llega a Europa con la misma fuerza.
En España, el gobierno del PSOE hace caso omiso, de forma extremadamente irresponsable, porque aquí todos gobernamos por intereses partidistas, no por el bien de la ciudadanía y…
Tachán! CRISIS, esa palabra que alguna vez hemos oído.
La oposición por entonces, ese partido con filia por las prisiones, irresponsablemente, culpa de todos los males de este país y del resto del universo a la gestión de Zapatero (que era pésima, pero ni el mejor de los economistas podría salvarse de ese meteorito financiero).
Y claro, llegó la mayoría absoluta de los de calle Génova. Y, bajo el amparo de la UE, decidieron empezar a desmantelar el Estado de Bienestar (ya los sociolistos habían hecho sus pinitos en la agonía de su legislatura) .
Atentaron contra los derechos de los trabajadores con la mayor salvajada que se ha visto a modo de reforma laboral (porque aunque ellos no querían, claro, tenían que hacerlo porque no quedaba otro remedio. Pobrecitos). Por otra parte, daban vía libre a los delincuentes con la amnistía fiscal para que todo el capital defraudado aquí y llevado al extranjero pudiera estar de vuelta de forma impune. Los casos de corrupción comenzaban a brotar como la espuma, y esas manzanas podridas de las que hablaban los propios representantes, hoy son hectáreas de manzanos, la mayoría dentro de Alcalá Meco.
Pero claro, la ciudadanía «vivía por encima de sus posibilidades». Así que lo normal, a partir de ese momento, sería un camarero o un trabajador de limpieza cobrase 800 euros por 40 horas de trabajo (cuando en realidad trabajaba más cercano a 60, pero si te quejas te echan), e incluso los universitarios mejores preparados de la historia de España sirvieran en los restaurantes de comida rápida. Y nos decían que formaba parte de la crisis. Que todo mejoraría. A abrocharse el cinturón.
Pero ojo, que el pueblo se pronuncia, y de forma más intensa en la manifestación del 15M, que da lugar a un partido morado que todos conocemos. Pues no tardaron ni dos días en poner en marcha el aparato político-judicial para derrumbarlos. Obviamente porque eran hijos de ETA, Venezuela, Irán, Charles Manson y Gengis Kan.
Todo este complot, claro está, con ayuda de los grandes medios de comunicación: Atresmedia, mediaset, y los magníficos periodistas (que no delincuentes con amigos en partidos políticos) de Eduardo Inda y Paco Marhuenda entre otros sinvergüenzas.
Tres años llevo oyendo que la economía española vuelve a florecer y que somos la hostia en vinagre. Y ese camarero sigue trabajando por la misma miseria, y ese universitario ha emigrado a la UE para buscarse una vida digna. (Pero eh, que el PSOE iba a eliminar la reforma laboral). Por lo tal, solo queda llegar a la conclusión de que la crisis se ha convertido en la excusa perfecta para cargarse el estado de bienestar. Y no soy economista para llegar a esta conclusión, pero el sentido común es el menos común de los sentidos.
Un ejemplo de lo anterior, sin ir más lejos, es que la persona con quien compartía esta conversación, que quiero y admiro, posee una carrera y dos másters, y este país no es capaz de ubicarla laboralmente, con todo ese conocimiento a sus espaldas.
Mucho menos de 27 años tardé en darme cuenta que los políticos han hecho de forma excepcional su trabajo: han logrado que la política se vea como la liga de fútbol, porque yo siempre seré de mi equipo, en las buenas y en las malas, aunque me robe, aunque se pase por el forro los derechos humanos y aunque deje sin futuro ninguno a mis hijos, pero en España pues eres del Madrid o del Barça y eres del PP o del PSOE. Realmente lo han conseguido, han analfabetizado mediáticamente a la población.
Pero espera, que vienen curvas. Vamos a sacar a Franco del Valle de los Caídos, pero solo en campaña electoral. Y lo vamos a sacar ahora después de 40 años. Porque antes no importaba que el mayor genocida de España del siglo XX estuviera en un mausoleo construido por esclavos republicanos. Antes nadie se acordaba de la dignidad de los fallecidos por la libertad, pero ahora es la mejor medida electoral de la historia.
Y ahora, con ese personaje teñido viviendo en la casa blanca… veremos qué bien cuando en la siguiente crisis la población comience a morir de hambre. Pero eh, no te quejes… que al menos tienes trabajo.