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No son pocas las imágenes y postales de Málaga que en parte de los siglos XIX y XX identifican la emblemática Plaza de la Merced con el nombre de «Plaza de Riego». Y lo es por Rafael del Riego, el teniente coronel del 2º Batallón del Regimiento «Asturias» que el 1 de enero de 1820 escribió una de las páginas más importantes de la Historia de España pronunciándose en Las Cabezas de San Juan a favor de la Constitución de 1812. Primera Carta Magna que fuera abolida por Fernando VII, que quería seguir gobernando como rey absoluto, a su vuelta al país tras la Guerra de la Independencia frente a Napoleón.
Tras el levantamiento de unas tropas que debían partir hacia América, en buques en mal estado comprados al zar de Rusia, a combatir los movimientos independentistas que habían comenzado una década antes, las tropas constitucionalistas se hicieron fuertes en San Fernando pero sin lograr entrar en Cádiz, que era su primer objetivo. Es entonces cuando deciden enviar a través de Andalucía una columna móvil encabezada por Riego, no con fin militar, sino para extender por los pueblos a su paso la idea de Libertad y sumar adeptos, haciendo ver al resto de España que no estaban atrapados en San Fernando.
Y en la noche del 18 de febrero de 1820 los soldados de Riego, perseguidos por las tropas del general O´Donnell, llegarían a Málaga. Un olvidado episodio de la ciudad que se recordará este próximo domingo 16 de febrero con una marcha de la reconstrucción histórica del propio batallón de «Asturias» a cargo de la Asociación Histórico – Cultural «Teodoro Reding» y las representaciones de la «Asociación Torrijos 1831», y que partirá a las 12:00 h. desde el número 12 de la Alameda Principal y seguirá, por las calles del Centro histórico, hasta la Plaza de la Merced. En este último punto tendrá lugar a las 13:00 h. un acto conmemorativo en el que participarán representantes municipales de Málaga y Las Cabezas de San Juan, así como del Club Liberal 1812 de Málaga.
Se trata de un evento organizado en el marco de las actividades del programa «Doscientos años del Trienio Liberal (1820-2020). Conmemoraciones y personajes», a través del que distintos colectivos de Málaga y Cádiz quieren recordar aquel primer período efectivo de constitucionalismo en España, y paréntesis, en este sentido, en el reinado de Fernando VII. Jon Valera, presidente de «Teodoro Reding», será el encargado de dar vida a Riego, al que lleva encarnando año a año desde 2007 en la conmemoración anual de Las Cabezas de San Juan, que este año tendrá lugar los días 18 y 19 de abril.
De los diversos intentos por restablecer la Constitución de Cádiz durante aquel reinado y devolver al pueblo el título de ciudadanos, el único que triunfó fue el de Riego, pues aunque la columna siguió un periplo tortuoso perseguida por las tropas absolutistas, la revolución se extiende finalmente a través de distintos movimientos constitucionalistas que surgirán en otros puntos de España, obligando al rey a jurar el texto de 1812: «He oído vuestros votos, y cual tierno Padre he condescendido á lo que mis hijos reputan conducente á su felicidad. He jurado esa Constitución por la cual suspirábais, y seré siempre su más firme apoyo. Ya he tomado las medidas oportunas para la pronta convocación de las Cortes. En ellas, reunido á vuestros representantes, me gozaré de concurrir á la grande obra de la prosperidad nacional» (…) «Marchemos francamente, y yo el primero, por la senda constitucional».
Pero el monarca no tardaría en conspirar para que las potencias de Europa lo restablecieran en el trono absoluto, y en 1823 los liberales tendrán que hacer frente a un ejército extranjero compuesto mayoritariamente de tropa francesa, los llamados «Cien Mil Hijos de San Luis», que acabarán con el Trienio Liberal. Y Riego, símbolo de aquella lucha por las Libertades, sufriría prisión y finalmente sería ahorcado en la Plaza de la Cebada de Madrid, comenzando así la llamada Década Ominosa, no faltando otros valientes que pagarán cara su valentía intentando emular el éxito del asturiano; como la última de aquellas tentativas, la del general José María de Torrijos en 1831.
Antes de albergar el monumento a este general y los restos de él y sus compañeros, ya durante el Trienio la Plaza de la Merced recibió el nombre de Riego en honor al Héroe de Las Cabezas, pero sería retirado con la vuelta al absolutismo. Tras la Década Ominosa sería Ignacio López Pinto, hermano de Juan López Pinto, otro de los liberales fusilados en 1831, quien siendo gobernador de Málaga decidió reponer el nombre de Riego, perdurando la denominación hasta la Guerra Civil española.
Por orden de antigüedad, los colectivos que integran el proyecto «Doscientos años del Trienio Liberal (1820-2020). Conmemoraciones y personajes» son: Asociación H.C. «Torrijos 1831», «Club Liberal 1812», Asociación Histórico – Cultural «Teodoro Reding», Asociación C.R.H. «Bandoleros de Grazalema», Asociación H. «Málaga Recreadora», Asociación «Vida y muerte de El Tempranillo, de Alameda» y Asociación «Manzanares. Estepona 1831».