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La muestra, de temática LGTBI y que podrá visitarse hasta el 2 de septiembre, es una regresión lúdica y abierta del artista a los recuerdos de la infancia que otorgan identidad. La obra de este pintor es un manifiesto por la libertad de expresión, tolerancia y diversidad
(Prensa Ayto Alh Torre)La Finca Municipal El Portón albergó en la tarde de este martes la inauguración de la exposición denominada ‘Vernáculo’, del artista Erik Rivera. Numerosas personas quisieron acudir a este acto, entre ellos, el alcalde, Joaquín Villanova, y el concejal de Cultura, Andrés García, junto a gran parte de los miembros de la Corporación Municipal.
Esta exposición LGTBI del pintor mexicano es una regresión, lúdica y abierta, a los recuerdos de la infancia que otorgan identidad, y a la vez, vulnerabilidad. En sus obras, se muestra un diálogo abierto con el espectador, que conforma una completa influencia visual para su desarrollo artístico y estético, que se fusionó con su interés por ahondar en su propio yo, logrando así un estilo particular, que se acerca al arte naif y al neomexicanismo; un arte ingenuo, abierto y sin censura.
Su obra también es un manifiesto explícito por la libertad de expresión, tolerancia y diversidad sexual. La exhibición Niños princesas presentada en el marco del 28 Festival Internacional de la Diversidad Sexual en el 2015, fue un homenaje a los activistas LGBTTI (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Travestis, Transgéneros e Intersexuales). El artista no pudo acudir a la exposición, pero sí la gerente Pilar Hernández, quien afirmó que no hay otro lugar mejor que el ayuntamiento de Alhaurín de la Torre para mostrar esta exposición, que puede visitarse hasta el 2 de septiembre.
En su pintura se pueden encontrar figuras de animales, santos, ángeles, alegorías clásicas y tradicionales, pero los retratos son el tema principal de su obra, en donde aparecen tanto artistas y personajes famosos como amigos y familiares cercanos. Cada uno tiene como característica principal los ojos grandes, los cuales simbolizan una ventana regresiva a la infancia, a aquellos momentos o instantes de la vida, que marcaron la personalidad y vida de cada uno de ellos, y que al mismo tiempo se vuelven un reflejo de la esencia de Erik.