Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 47 segundos
Medio centenar de jóvenes de la provincia participan en el proyecto Moscatel Lab impulsado por La Noria para el uso turístico de lagares, paseros, viñas y todo el patrimonio vinculado a la uva pasa
Natacha Rivas ha destacado en El Borge la oportunidad que ofrece el territorio rural y la uva moscatel como motor de emprendimiento verde y de lucha contra la despoblación puesto que favorece el asentamiento de los jóvenes
La iniciativa, de la Asociación Cultural El Pasero, se enmarca en el convenio de colaboración entre la Diputación de Málaga y la Fundación «la Caixa» a través de CaixaBank
(Prensa Diputación) El centro de innovación social La Noria de la Diputación de Málaga, junto a la Asociación Cultural El Pasero y la Fundación «la Caixa», ha celebrado hoy en El Borge una jornada formativa para el impulso de la uva moscatel y el patrimonio arquitectónico popular como oportunidad para el emprendimiento en la Axarquía.
Medio centenar de jóvenes malagueños participan en el proyecto Moscatel Lab, iniciado en marzo, que busca el fomento de la uva moscatel como dinamizador cultural y económico de la comarca a través del acercamiento a este cultivo, su papel en la cultura malagueña y sus posibilidades para el emprendimiento social. Para ello, además de llevar a cabo acciones para la profesionalización del cultivo, se realiza una capacitación entre los jóvenes agricultores para el uso turístico de lagares, paseros, viñas y todo el patrimonio arquitectónico popular vinculado a este sector agrario.
Desde marzo se han celebrado charlas en la Universidad de Málaga, Rincón de la Victoria, Vélez-Málaga y en el centro de innovación social La Noria, y hoy sábado el proyecto ha llegado a El Borge con una jornada en torno a la arquitectura tradicional y de bioconstrucción vinculada al campo, especialmente relacionada con el terreno en el que se cultiva uva moscatel en la comarca. Salvador Moya, Jonatan Fernández y los profesionales The Pueblo Project han sido los encargados de impartir unos talleres con los que, a través de la puesta en valor de este tipo de arquitectura, se busca recuperar paseros, lagares, cortijos o muros, entre otros elementos característicos.
Los materiales y métodos de construcción con los que se ha trabajado son los muros de piedra seca para evitar la erosión del terreno, los muros de acequia y alberca rehabilitados y las minas de agua tradicionales para trabajar un aspecto esencial como es el agua para el riego. También se ha trabajado el uso de la cal para la conservación de los muros como material transpirable e impermeable, además de biodegradable, bactericida y fungicida.
La vicepresidenta segunda y diputada de Innovación Social y Atención al Despoblamiento, Natacha Rivas, que ha participado en la jornada formativa junto al presidente de la Asociación El Pasero, Ezequiel Moya, ha destacado «la oportunidad que ofrece el territorio rural y un producto como la uva moscatel como motor de emprendimiento verde y de lucha contra la despoblación, puesto que favorece el asentamiento de los jóvenes en el territorio rural de la comarca de la Axarquía a través de la puesta en valor de este recurso natural de forma sostenible».