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El de Portoplano tomó café aquella tarde con Juan de Mairena, y ambos apenas hablaron casi nada, pero se dijeron muchas cosas.
– Pregunten a los que duermen en la calle, que los que les ha sucedido en la existencia y en la vida, quizás así se podrán poner soluciones para el futuro.
– ¿En un sistema social, existe una elite que gestiona dicho sistema, existe una mayoría equis, que cree y defiende en mayor o menor medida dicho sistema, y otro colectivo-minoría, en mayor o menor grado, teórica y en la práctica se opone al sistema, a los que gestionan el sistema y a las formas de organización, etc.?
¿La cuestión, es, incluso aunque una mayoría de personas de la minoría, que dice oponerse al sistema, y lo hacen de buena voluntad y con buena intención y con contenidos y conceptos suficientes, si no son, diríamos, el Pepito grillo que el mismo sistema ha puesto, permite y deja, para ir rectificando? ¿O sean la válvula de escape, que el mismo sistema ha incentivado y permite, para que así de ese modo, esas válvulas sirvan de anuncio, información, de encarrilamiento, de dirigir y de controlar? ¿O, aunque parezcan que están en contra del sistema, son parte del sistema, aunque crean que están fuera de él?
¿Es ese equilibrio de la naturaleza, de predadores y de no predadores, cada uno en su nicho, pero que todos contribuyen a que el sistema total funcione, aunque haya épocas o tiempos, que parece que va a cambiar todo radicalmente, pero solo contribuyen a que vaya modificándose moderadamente…, cambios pequeños autocontrolados y heterocontrolados…?
¿Y a nivel mundial, sucede los mismos con diversas sociedades-territorios-Estados?
– ¿Existe la ley moral o no existe, o en qué existe y en qué no existe? ¿Y existe la ley moral natural a y en el ser humano o no existe, o en qué existe y en qué consiste y en qué no…? Ste es el gran dilema y problema humano. Los demás derivan de éste.
– Errores morales producen consecuencias y errores en multitud de temas y cuestiones.
Errores espirituales y religiosos, causan multitud de errores y consecuencias en errores morales y éticos.
– Vivimos pero sabemos lo que es vivir, existimos pero sabemos lo que es existir, pensamos pero sabemos lo que es pensar.
– Pessoa y Juan de Mairena y Juan de Portoplano y Schopenhauer se reunieron y formaron una tertulia alrededor de un café.
– Vivir es un viaje, nos dice Pessoa, del alma en la mente y en el cuerpo y en la materia, añadiríamos nosotros, plagiando y modificando a Pessoa. Existen tantas vidas y tantas existencias en la misma vida, en la vida de un ser humano.
– ¿Nos dirigimos al hambre o a la guerra, o al hambre y a la guerra, o a la guerra y al hambre en la Piel de Toro? ¿¡No se pueden solucionar los conflictos sociopolíticos en paz, sin tener que ir al hambre o ir a la guerra…!? ¡La paz es la madre y el padre de todos los bienes y de todas las riquezas, la no-paz es el padre y la madre de todos los males! ¿¡Qué puedo decir, yo, yo modesto articulista, para que Celtiberia no termine ni en el hambre de grandes zonas, ni en la guerra, qué puedo escribir o redactar o pensar yo, yo modesto escritor…!?
– Un librepensador es aquella persona, que bebe de muchos ríos, porque sabe, que todos los ríos llevan agua, y de todos puede aprender algo, y que todos los ríos llevan agua limpia y contaminada.
– Si la humanidad quiere y desea avanzar, avanzar en todos los sentidos, porque de ello depende su supervivencia, tiene que someter, hasta dónde pueda todas las cuestiones humanísticas y filosóficas, que son la base de todas las sociedades-culturas al método científico, de todas las ciencias sociales. Si no se hace, las culturas-sociedades-ideologías-religiones-filosofías seguirán enfrentadas en el corazón de los humanos, y éstos terminarán confrontándose, de muchos modos y maneras, y uno de ellos, el más radical será el conflicto elevado, o de grandes consecuencias, o armado.
– Sentir y presentir, percibir y ver, que mi sociedad se dirige hacia un grave conflicto, sin saber qué idea o concepto o frase, se puede lanzar al mundo, para que esto no suceda. Este es el drama de todo observador y pensador y escribiente…
– Observar es necesario, razonar y analizar y pensar lo observado también, y hacerlo a la luz del saber ortodoxo, pero con los juicios temerarios y las sentencias definitivas sobre el ser de otras personas hay que ser muy prudentes. Encontrar el equilibrio entre percibir la realidad exterior y la interior es un ejercicio muy costoso, no todo el mundo lo alcanza, en esa combinación de verdad-bondad-bien-prudencia-realidad…
– No todo el mundo sabe de todo, sobre el corazón humano, posiblemente muy pocas personas, aunque quién sepa, quizás jamás escriba un libro, ni haga teoría, ni conferencias, ni será considerado por nadie, como alguien que sabe sobre la mismidad más profunda.
El de Mairena y el de Portoplano se levantaron del café y de la cafetería, y sin apenas decirse nada, quedaron con la mirada que aquella conversación, apenas sin palabras, la continuarían otro día.
http://twitter.com/jmmcaminero © jmm caminero (02 febrero-26 mayo 2019 cr). Fin artículo 1.665º: Fragmentos VI de Juan de Portoplano