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El presidente de la Diputación, Francisco Salado, destaca la solidaridad de los malagueños con los palmeros y ha agradecido su labor a «estos voluntarios, un grupo de profesionales que está sobradamente preparado para hacer frente a catástrofes naturales como la que está sufriendo La Palma»
Es la primera dotación de la provincia que se desplaza a la isla para formar parte del Dispositivo de Emergencias Canarias tras el compromiso adquirido entre Francisco Salado con el presidente del Calbildo de La Palma Mariano Hernández
El CPB ofrecerá su ayuda una vez al mes mientras sea necesario
(Prensa Diputación) Un grupo de siete integrantes del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga ha emprendido esta mañana su viaje a La Palma donde durante los próximos días realizarán labores de limpieza y rescate derivadas de la erupción de un volcán de la isla canaria.
El presidente de la Diputación, Francisco Salado, ha destacado la solidaridad de los malagueños con los palmeros y ha agradecido su labor a «estos voluntarios, un grupo de profesionales que está sobradamente preparado para hacer frente a catástrofes naturales como la que está sufriendo La Palma».
Se trata de la primera dotación de la provincia que se desplaza a la isla, todo gracias al compromiso adquirido entre la Diputación Provincial de Málaga y el Cabildo de La Palma tras la conversación mantenida los presidentes Francisco Salado y Mariano Hernández, respectivamente, para ofrecer ayuda y apoyo desde la institución provincial malagueña.
Pero no será el único, ha recordado Salado, «pues esta previsto que estas labores de cooperación se desarrollen, al menos, una semana al mes mientras sea necesario, contando para ello con bomberos del CPB que se han ofrecido de forma voluntaria para el operativo».
En este caso, el grupo está compuesto por María García, Antonio Manuel Cobos, Salvador Olivas, Joaquín Molina, Marta Soria y Jair Pereira, a los que se suma el jefe técnico del Consorcio, Francisco Soriano. Cada uno de ellos lleva su propio equipo de protección individual (EPI), aunque allí trabajarán con un vehículo de Lanzarote y herramientas y equipamiento de bomberos canarios.
Este primer grupo, una vez llegado a la isla, pasará a formar parte íntegramente del Dispositivo de Emergencias de Canarias organizado por la erupción del volcán, como si de una dotación de allí se tratase. Acometerán todas las actuaciones que se soliciten, como puede ser el rescate de personas y animales, labores de limpieza o retirada de obstáculos, entre otras.